El Índice Global de Paz 2017, producido por el Instituto para la Economía y Paz, que mezcla distintas bases de datos mundiales para medir la intensidad de los conflictos (de origen interno o externo), la militarización y la seguridad ciudadana de 163 países del mundo, revela que en Venezuela los costos públicos y privados de lidiar o combatir la violencia alcanza los 63 mil 989 millones de dólares.

Esto considerando los gastos militares y policiales del gobierno, los de los empresarios en cuidarse de la inseguridad en lugar de usar el dinero en invertir o mejorar sus negocios, la pérdida de productividad por las heridas físicas y emocionales sobre los trabajadores, los ingresos que dejan de percibir las familias por la muerte o discapacidad total o parcial de alguno de sus miembros e incluso por el miedo de las personas a salir a la calle.

El índice, dominado por Islandia desde 2008, es seguido de Nueva Zelanda, Portugal, Austria y Dinamarca. Por el otro lado, el país menos pacífico del mundo, otra vez, es Siria, precedido de Afganistán, Iraq, Sudán del Sur y Yemen.

Por su parte, Venezuela ocupa el puesto 143, mientras que en el informe de 2008 estábamos en un mejor 103. Según el análisis del informe, «el control del gobierno venezolano sobre instituciones claves le ha permitido reducir la influencia legisladora de la Asamblea Nacional, dominada por la oposición. Los crecientes límites a las formas que tienen los votantes de oposición para canalizar sus preocupaciones por los canales institucionales está elevando el riesgo de disturbios sociales violentos y las protestas se han intensificado desde el comienzo de 2017».

Venezuela es sólo menos violento, en el Índice Global, que Colombia, el cual a pesar de mejorar por el cese al fuego y de conflicto con las FARC, empeoró por un crecimiento del conflicto con pequeños grupos del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y un retraso en las contribuciones financieras con la ONU para las misiones de paz. Venezuela tiene un gravísimo retraso en estos pagos. Ecuador es el que más se ha beneficiado, especialmente con la reducción de muertes en la frontera, del tratado de paz con la guerrilla. En el tope de Sudamérica permanecen Chile y Uruguay.

Entre los indicados principales, Venezuela sale peor valorado en relación con inseguridad ciudadana, bajando al puesto 153, mientras que sube al 137 entre los más militarizados y hasta el 110 al medir conflictos domésticos e internacionales, donde sale mejor valorado en cantidad e intensidad de conflictos.

Lo peor en Venezuela: tasa de homicidios, criminalidad percibida, crímenes violentos, manifestaciones violentas, acceso a armas pequeñas y ligeras y deuda con la ONU para la paz.

Fuente: El Nacional

Fecha: 18 de agosto de 2017

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