Sé que estos días deben ser muy duros para ti. Mientras algunos de tus superiores deben estar repitiendo las mentiras que les dictan desde el aparato de propaganda madurista, fuera de las paredes del cuartel están tu familia, tu pareja e hijos pequeños y hasta tus amigos de la infancia contándote cuánto sufren.

Quiero invitarte a recordar para qué te hiciste soldado. Y a que tus familiares, tus amigos y las personas que te quieren y aprecian te hagan llegar estas palabras, porque el tiempo no juega a tu favor y es momento de que decidas tu futuro y el de los tuyos.

Hoy es domingo y quedan apenas seis días para el ingreso de la ayuda humanitaria. Es necesario que sepas que la ayuda humanitaria entrará. Sí o sí. Y que sepas que la ayuda humanitaria va a llegar a quienes más la necesitan. Sí o sí. Es importante que entiendas que la ayuda humanitaria es un hecho, pasará y puedes darla por sentado. Sí o sí.

De modo que todavía puedes formar parte de este momento histórico en el cual quienes menos tienen, y más necesitan de nuestra ayuda, empiecen a sentir la certidumbre de que en nuestra Venezuela se puede gobernar con justicia.

Considera esto y piensa una vez más: ¿para qué te hiciste soldado?

Fue para defender a tu Pueblo. Recuérdalo. Tú juraste defender a tu Pueblo y a tu Patria. Y hoy ese Pueblo que es la Patria misma está muriendo de hambre, porque no hay comida ni medicinas, mientras un grupo de corruptos, algunos de ellos tus superiores, se benefician de que el país siga en la miseria.

Durante años te han mencionado el nombre de El Libertador. También durante años has sido testigo de cómo han traicionado el pensamiento de Bolívar. Te han puesto a cuidar elecciones. Te han puesto a racionar comida. Te han puesto a reprimir a tus hermanos.

Ahora pretenden convertirte en el escudo humano de una manada de corruptos que estará resguardada en sus palacios, mientras pretenden que tú seas el culpable de que la ayuda humanitaria no llegue a quienes están esperándola para no morir.

En eso han querido convertirte: en su escudo humano, en su rehén, en su excusa para ir contra el pueblo.

Piensa en tu familia. Piensa en tus hijos. Piensa en tu madre. Piensa en la abuela que tanto quieres. Ellos también son este Pueblo que te pide que no dejes morir por capricho político. Y te necesitan.

Tú mismo sabes que ni siquiera puedes asegurarles sus tres comidas a tu familia, mientras quienes te utilizan derrochan dinero de forma vulgar y desmedida.

Para las fuerzas democráticas, tu futuro es vital, yo particularmente creo que tienes una gran responsabilidad en que nuestra Venezuela pueda ser una Nación donde haya progreso y oportunidades. Necesitamos que en la reconstrucción del país se pueda dignificar tu labor y podamos darle calidad de vida a tu familia. Tú y ellos lo merecen, ¿verdad?.

Nosotros queremos pedirte que defiendas la Constitución, que no habrá ninguna consecuencia por hacerlo y que eso abrirá las puertas para devolverle la democracia a nuestra Venezuela y por tanto las oportunidades para ti y los tuyos; mientras tanto, quienes están en Miraflores no están dispuestos a hacer nada por ti. Ellos quieren obligarte a reprimir e incluso matar, cuando no están dispuestos a morir, ni a abandonar sus privilegios ni a defenderte.

Quedan seis días para que aceptes ese clamor del Pueblo y no participes en una acción de lesa humanidad en la cual te quieren como chivo expiatorio, como carne de cañón, como cómplice de un crimen que no prescribirá jamás y que cargarás contigo el resto de tu vida. ¿Es eso lo que deseas para ti, para los tuyos, para tu país?

Yo sé que tú puedes formar parte del futuro de esta Nación que te necesita.

Cientos de miles de venezolanos han dado un paso adelante y han decidido convertirse en voluntarios. Hoy esos venezolanos piden que te pongas de su lado, es decir, del lado del Pueblo, no del lado de los poderosos.

Son millones de venezolanos que te esperan para reconstruir Venezuela juntos.

¿Cuántas veces te han hablado del supuesto bloqueo? Permíteme contarte algo que es muy importante que entiendas: quienes te dan órdenes decidieron comprarle a China, a Rusia y a Cuba más de noventa toneladas de medicamentos.

Te lo deben haber dicho hasta el cansancio, ¿pero te has preguntado para qué compraron tantas medicinas, si según ellos supuestamente no hay una crisis? Una pregunta más: ¿cómo hicieron para conseguir todas esas medicinas si supuestamente hay un bloqueo del que tanto te han hablado?

¿Te das cuenta? Mienten una y otra vez y sólo quieren usarte como una excusa para dejar morir, para frustrar el deseo de Libertad que viven tu familia, tus amigos, tú mismo.

Haz un repaso y te darás cuenta. ¿Qué le ha dado la mal llamada revolución a ti y a tu familia? ¿Cuántas de las cosas que has podido obtener son producto del chantaje? No puedes ayudarlos a hacer mercado, no puedes comprarte un teléfono, ni un par de buenos zapatos de goma, no puedes ayudar a los tuyos con sus necesidades.

En Miraflores no les importa cuánto sufren los tuyos, cuánto padece tu familia, cuánto cuesta sobrevivir en medio de este infierno en que han convertido el país.

Joven soldado: sé muy bien que estás cansado de ver tanta corrupción a tu alrededor, tanto abuso y tanto sufrimiento. Tú sabes mejor que nadie cómo están los hospitales, cómo están las escuelas, cómo están los mercados. Tú sabes que mientras tú y tu familia se trasladan en perreras, la cúpula de tu institución no se avergüenza de mostrarte cuánto se han enriquecido y andan en camionetas último modelo y máximo lujo. Tú sabes mejor que nadie que en este momento la Fuerza Armada tienen un liderazgo que no enorgullece a nadie. Tú sabes mejor que nadie que un grupito se mantiene enquistado en sus puestos de mando para robar de manera flagrante y vergonzosa.

Sabes que en tu familia o en la familia de tus amigos están pasando hambre. Sabes que cada tratamiento médico y cada intervención quirúrgica en nuestro país es un padecimiento. Sabes que contigo del lado del Pueblo que clama un cambio todo esto será más sencillo, pero si decides quedarte por fuera igual lo llevaremos adelante.

No por soberbia, como hacen en Miraflores, sino porque no vamos a permitir que nuestros hermanos venezolanos sigan muriendo de hambre y de mengua. No lo vamos a permitir. Y te extendemos nuestra mano para que tú tampoco lo permitas.

Ayúdanos.

Sé que será muy difícil que estas palabras lleguen a ti, porque el miedo de los usurpadores te mantiene secuestrado en los cuarteles, pero sé muy bien que me leerán tus amigos, tu pareja, tus hijos, tus familiares, tu madre, tu padre, tus hermanos y tus hermanas. A ellos les pido que te hagan llegar estas palabras: una llamada telefónica, un mensaje de texto, una idea al menos que llegue hasta ti en forma de SMS diciéndote “Hijo, ponte del lado de la Democracia. Valdrá la pena”.

Sé que cuando te lleguen esas palabras, vendrán de alguien que te ama profundamente. Tanto como tú juraste amar a esta Patria. Es momento de que hagas valer ese amor que sientes por Venezuela: hagamos que pase la ayuda humanitaria sin problemas.

Tienes la oportunidad histórica de convertirte en un protagonista de este momento en que la Libertad y la Democracia entrará al país transformado en ayuda y en respaldo de personas honestas y valientes como tú. Escucha el llamado de la Patria: hoy es tu madre la que llora al verte del lado de los poderosos. Y esta vez su llanto no va a cesar.

Ayúdanos.

Valdrá la pena y nos daremos un abrazo honesto en Libertad.

¡Dios bendiga hoy y siempre al Pueblo venezolano!

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