La mortalidad infantil, el mal estado de la infraestructura y el déficit de medicamentos se ha venido incrementando en el Hospital Manuel Núñez Tovar del estado Monagas, y así lo denuncia su personal médico.

Ante la vulneración del derecho a la salud y a propósito de la nueva jornada de protesta que inició hace más de 50 días, los residentes en compañía de los especialistas se han declarado en asamblea y manifestación permanente hasta tanto, los pacientes puedan recibir una atención médica adecuada como lo establece la ley.

Aunque el director del centro, Luis Briceño, no se identifica abiertamente con el chavismo, ha mantenido una actitud bastante política que lejos de solucionar las deficiencias, acentúa el caos y desvía la responsabilidad del Estado de garantizar la dotación de insumos y medicamentos.

“Ciertamente entre el director y los médicos no ha existido un enfrentamiento directo. Él respeta las protestas, sin embargo,  las mesas de trabajo que se han realizado en conjunto siempre terminan en promesas que nunca se cumplen. Y además los pacientes agreden a los médicos porque las autoridades hacen creer que en el hospital encontrarán el tratamiento que requieren cuando en la realidad no es así”, expresó un traumatólogo al tiempo que denunció el abandono en el que se encuentra este servicio por tener un quirófano y medio operativo de tres que posee.

Quienes ameritan atención en las unidades de traumatología, por ejemplo, muchas veces no pueden recibir el tratamiento correspondiente y mucho menos intervenirse quirúrgicamente porque no existe el material. En este punto, los médicos destacan que han sido blancos de agresiones porque los milicianos que “custodian” el hospital los acusan de robarse los antibióticos u otros insumos.

No somos los culpables

El Núñez Tovar tiene al menos 20 quirófanos, de los cuales solo seis están operativos. De hecho, el único quirófano que se encontraba en el área de emergencia se inundó, por cuanto quienes ingresan por emergencia son intervenidos en el quirófano central.   Igualmente, desde hace dos semanas las cirugías electivas están suspendidas porque no hay insumos para operar.

Los problemas institucionales por la poca voluntad de dotar los centros hospitalarios han ocasionado que los pacientes reclamen e incluso, amenacen de muerte a los médicos por ser los supuestos responsables de que no se puedan operar o atender por lesiones menos graves, cuando el deber recae sobre el Estado.

El servicio de Traumatología tiene 3 años sin ofrecer consulta externa y la gobernación de Monagas aseguró recientemente a través de medios impresos que se había inaugurado el área, sin embargo, se pudo constatar posteriormente que el techo no está en las mejores condiciones ni tampoco existe el equipamiento adecuado para garantizar un derecho que es universal.

En ese sentido, el personal solicitó que la jefa de infraestructura de la Comisaría de Salud desmintiera tal inauguración e instó a que se publicaran oficialmente todos los materiales y medicamentos que no hay en el centro hospitalario, porque aunque han recibido inyectadoras, macro y microgoteras, los medicamentos aún no llegan. Dicho petitorio sigue sin cumplirse.

Derecho a la protesta

La Constitución de la República dispone en el artículo 68 que los ciudadanos tienen el derecho a manifestar pacíficamente y sin armas, y en estricto cumplimiento de la ley, los residentes y médicos adjuntos del Hospital Manuel Núñez Tovar han decidido fijar posición frente a unas políticas de Estado que han llevado al mayor grado de abandono y desidia en el sector salud.

Apostarse en la puerta del Hospital y cerrar una de las vías de acceso ha sido el común denominador de estos últimos días. Después de pasar revista, los médicos inician su jornada de protesta y explican a los pacientes que no cuentan con los insumos necesarios para atenderlos.

Según relató un especialista, el pasado 13 de mayo los residentes se disponían a manifestar pacíficamente cuando llegó una “cuadrilla” enviada por la gobernación para hacer un mantenimiento al hospital, pero en realidad se trataba de grupos irregulares que amedrentaron a todos en el lugar y advirtieron que los “médicos guarimberos impedían la entrega de insumos para el pueblo”.

Ante el panorama, se convocó a una reunión extraordinaria con el director, quien aseguró que se encargaría de explicar a pacientes y familiares las deficiencias con las que contaban actualmente. Sin embargo, de ese encuentro no hubo mayores frutos.  Cabe mencionar que Sanidad ha satanizado las protestas dado que los residentes son amenazados con botarlos o sustituirlos.

En cuanto a las demás acciones que han tenido, destaca la del 15 de mayo, cuando se suspendieron las consultas privadas -en respaldo a la lucha que vienen dando los médicos del Núñez Tovar- y se volcaron a las calles para exigir respeto a la vida

Actualmente, el gremio se encuentra en asamblea permanente, a fin de exigir que el Estado se responsabilice por los cientos de pacientes que han sido atendidos a medias o simplemente no han podido ser recibidos porque no están dadas las condiciones para que se garantice el derecho a la salud.

Quienes se han dedicado por años a salvar vidas, no consideran que la política tenga que asociarse con la medicina, porque todos los venezolanos deben ser atendidos cuando así lo requieran y de la mejor manera posible.

Para este lunes 22 de mayo, se espera que en Monagas todos los gremios marchen por la vida y contra la pretensión gubernamental de cambiar la Constitución a través de una Asamblea Constituyente Comunal, que lejos de permitir la paz busca desmontar el sistema democrático en su totalidad.

Fuente: Prensa María Gabriela Hernandez Monagas

Fecha: 22 de mayo de 2017

Ir a la barra de herramientas