A casi la mitad del sueldo mínimo “ajustó” el gobierno el precio de venta de la carne, lo que significa que un venezolano debe trabajar 15 días para comprar sólo 1 kilo de carne. Regulación que supone la desaparición de este producto cárnico de los hogares venezolanos, en los que más del 50% de la población percibe una remuneración mensual de 177 mil 507 bolívares.
El presidente de Fedenaga, Carlos Odoardo Albornoz, reveló que recibieron una comunicación por parte de la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde) en la que especifica el precio establecido para la comercialización de la carne de bovino.
De acuerdo a esta medida, el kilo de lomito quedó en 80 mil bolívares, la punta y el solomo en 75 mil bolívares, el muchacho cuadrado, muchacho redondo, pulpa negra, chocozuela y ganzo en 49 mil bolívares el kilo.
Por su parte, para el lagarto sin hueso, paleta, papelón, falda, pecho, solomo abierto y lagarto reina quedó fijado su precio en 47 mil bolívares. Mientras que lo más barato, en 38 mil bolívares, quedó el hueso rojo, costilla y lagarto con hueso el kilogramo.
Prensa Henrique Capriles
08/11/2017