La certificación de la OPS de la erradicación del sarampión y la rubéola en Venezuela figuró como un logro en la Memoria y Cuenta de 2015.

A pesar de la certificación que otorgó la Organización Panamericana de la Salud a Venezuela por la erradicación del sarampión, la rubéola y la rubéola congénita, hasta el 19 de noviembre se registraron en el país 235 casos sospechosos no confirmados de sarampión, 334 de rubéola y 5 de rubéola congénita, de acuerdo con los formularios EPI 12 con los que se elabora el Boletín Epidemiológico del Ministerio de Salud, que no es publicado pero que maneja la Sociedad Venezolana de Salud Pública y la Red Defendamos la Epidemiología Nacional.

Según esos datos, los casos sospechosos no confirmados de sarampión han ido en aumento. En 2013 hubo 178, en 2014 se reportaron 240 y en 2015 fueron 292. En el caso de la rubéola, se produjeron 509 en 2013, 582 en 2014, 461 en 2015 y 334 en lo que va de 2016. Aunque en la Memoria y Cuenta de 2015 la cobertura de la trivalente viral (que incluye sarampión, rubéola y parotiditis) fue de 97%, médicos denunciaron la escasez de la vacuna en varias oportunidades durante ese año por problemas con las importaciones y advirtieron del peligro de que pudiera regresar alguna enfermedad erradicada por fallas en los esquemas de inmunización. En ese mismo documento, además, aparece como un logro del año 2015 la certificación que le entregaron en físico esta semana a la ministra Luisana Melo.

“Así como la OPS da un certificado de ‘buena conducta’ por haber cumplido estas metas, debería dar un certificado de ‘mala conducta’ cuando las coberturas son deficientes y reaparecen enfermedades como la difteria. Quizás, con este reconocimiento al Ministerio de Salud de Venezuela, pretenden neutralizar el impacto negativo del retroceso que significa una epidemia de difteria después de 24 años sin casos, indicador indiscutible de la debilidad del sistema de salud público de Venezuela”, critica José Félix Oletta, ex ministro de Sanidad.

El país reportó los últimos casos autóctonos y confirmados de estas enfermedades en 2007, cuando hubo 32 personas con sarampión y 62 infectados con rubéola.

FUENTE: EL NACIONAL

21 DE DICIEMBRE DE 2016

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