La Asociación Venezolana de Hemofilia (AVH) señaló que 272 de los 4.990 pacientes con la enfermedad hereditaria que hay en el país están en situación de vulnerabilidad y requieren de factor de coagulación VII, que estado ausente desde hace dos años.
La AVH señaló que en lo que va de 2018 ha registrado 12 personas fallecidas por la falta de factores de coagulación y otras medicinas y por complicaciones provocadas por las hemorragias.
La asociación sostuvo que la dotación que se ha realizado en los centros de salud —en el marco de la cooperación técnica— no ha sido suficiente y solo alcanza para atender emergencias. Señaló, de este modo, que los centros de las ciudades de San Cristóbal, Ciudad Bolívar, Barcelona, Valencia y Caracas distribuyen tratamiento a comunidades cercanas, mientras otras localidades, como Calabozo y Maracay, ofrecen únicamente a pacientes que habitan en esas poblaciones.
La AVH indicó que hay disponibilidad del factor VIII en San Cristóbal y de factor VII en Caracas. Se espera que, por cooperación técnica, llegue al país factores IX para los pacientes que padecen de hemofilia tipo B.
Pese a los suministros, resaltó que aún hay más pacientes que tienen dificultades para conseguir sus tratamientos para controlar los sangrados y, además, deben enfrentar otras limitaciones para alimentarse e incluso trasladarse a los centros de atención, especialmente aquellos que viven en el interior del país.
De los 4.990 casos con hemofilia que hay en el país, 2.185 tienen hemofilia A (déficit del factor VIII), 575 el tipo B (factor IX); mientras 1.049 presentan la enfermedad von Willebrand (EvW), y 1.181 otras coagulopatías.
La organización recordó que el Estado venezolano es el responsable de garantizar el acceso oportuno y constante de los tratamientos. La imposibilidad de conseguirlos incluso obligó a 56 hemofílicos a emigrar del país para buscar sus factores de coagulación.
Con información de El Pitazo