Franklin Duarte, diputado y jefe de la Comisión Permanente de Familia, indica que organizaciones no gubernamentales con incidencia del lado colombiano que manejan estadísticas de la niñez en situación de riesgo han reportado que hay cerca de 2300 niños, niñas y adolescentes en trabajo informal en la franja limítrofe y, más grave aún, denunció que aproximadamente hay 500 que fueron reclutados por los grupos irregulares.
La información la suministró durante su participación en un conversatorio cuyo tema principal fue la niñez en situación de vulnerabilidad y trabajo informal, realizado en el salón Simón Rodríguez de la Asamblea Nacional. También participaron representantes de las organizaciones Casa Don Bosco, Éxodo y la Central de Trabajadores, a cargo de Marcela León.
Duarte se refirió a que en Venezuela hay una cruda realidad: los niños y niñas y adolescentes están siendo explotados laboral y sexualmente por lo que en sesión ordinaria propondrán la reforma de la ley y erradicar el trabajo infantil.
Dijo que analizan las cifras aportadas por las ONG y que harán foros y conversatorios para visibilizar esta problemática, «que no es del interés en las autoridades que usurpan el poder».
Los estados donde hay más menores de edad vulnerados en sus derechos son Zulia, Bolívar y Táchira. La cifra que presentó al principio corresponde a Táchira, zona donde –denunció– trabajan de caleteros y carretilleros. «Cobran 10.000 pesos diarios, 30.000 al mes y luego son captados por los grupos irregulares que les pagan un millón de pesos al mes. En el norte de Santander es donde más se ve esa problemática».
Jairo Rada, integrante de la Casa Don Bosco, no aclaró el panorama respecto a los niños y adolescentes en Caracas. «Cerca de 1400 están en situación de riesgo y un promedio de 600 están en trabajo informal».
Las estadísticas son recopilación propia y de otras ONG, pues no hay datos oficiales, por lo que no son las definitivas para describir esta crisis social.
Rada explicó que la casa anteriormente trabajaba con niños y desde hace tres años lo hace con la modalidad de patios abiertos para recibir a los adolescentes y, ahora, a madres con niños lactantes.
Con información de Crónica Uno