El drama de conseguir transporte público, se ha extendido en toda la geografía de Venezuela. La causa de esta problemática, se agudiza ante la falta de repuestos para las unidades, así como de combustible, lubricantes para motores, cauchos y baterías.
Dicha situación, está afectando a los merideños, quienes pasan hasta tres horas para poder abordar alguna unidad de transporte que los lleve a su destino, y no siempre la espera termina con éxito. Muchos usuarios deben optar por abordar camionetas particulares con tolva que trasladan hasta 30 personas allí, sin ningún tipo de seguridad y cobrando hasta el doble del costo del pasaje.
De acuerdo con el secretario de Reclamos del Sindicato de Transporte de Mérida, Yovanny Nieto, cerca de 80% de las unidades de transporte público con las que contaba la entidad andina, no están prestando servicio debido a la escasez de repuestos.
Además del transporte público tradicional, en Mérida existe el servicio de trolebús y trolcable, pero abordar alguna de las unidades de estos sistemas de transporte es cada vez más difícil, además de que la mayoría de los usuarios necesitan utilizar también las rutas de transporte urbanas o suburbanas para poder llegar a sus destinos.
La escasez de efectivo agrava el problema de rutas largas
Los habitantes de municipios aledaños a la ciudad de Mérida esperan hasta más de tres horas, para poder abordar una unidad de transporte público que los lleve a la capital del estado.
En este sentido, transportistas de distintas líneas prevén que la crisis llevará a la pronta paralización del servicio si no se encuentran soluciones, ya que las pocas unidades que continúan laborando desde hace un mes deben hacer hasta dos horas de cola en las estaciones de servicio para cargar combustible.
Con información de El Pitazo
04/12/2017