Durante la «campaña electoral» Nicolás Maduro, realizó varias promesas para mejorar la calidad de vida de los venezolanos, entre ellas acabar con la inflación, activar nuevas herramientas a través de la Ley de Precios Acordados, para superar los problemas económicos, fortalecer los Clap y realizar una ofensiva para acabar de una vez por todas con la llamada Guerra Económica.

Asimismo, prometió mejorar los beneficios y ayudas sociales a través del carnet de la patria, así como consolidar el programa Chamba juvenil. También prometió fortalecer el sistema de la educación pública, expandir y mejorar el servicio de salud pública, así como extender la política habitacional hasta llegar a los 5 millones de viviendas.

A pesar de la muchas promesas que hiciera Maduro, los problemas sociales que se padecen en el país se mantienen y se han agudizado por una gestión cuyos problemas él mismo ha creado.

En las principales calles de Venezuela, aún se mantienen los rastros de los costosos afiches, graffitis y vallas publicitarias, utilizadas en la campaña electoral, cuyo dinero pudo ser invertido en mejorar las instalaciones del Hospital J.M de los Ríos, para la atención de cientos de niños, en la compra de medicamentos para los pacientes con cáncer o para ofrecerle mantenimiento al sistema Metro de Caracas.

Mercedes Escobar, vecina del barrio José Félix Rivas, en Petare, indicó que “aquí en el barrio un grupo de vecinos llevamos a cabo una labor social para atender a las personas de menos recursos económicos, especialmente a los niños y ancianos. En estos 30 días, no hemos visto o sentido mejoras en nuestra calidad de vida, de hecho los problemas de servicios públicos como el transporte, distribución de agua potable y vigilancia, se han agudizado”.

Indicó Escobar, que también se observan mayor cantidad de personas buscando comida entre los montones de basura y que también en la comunidad y zonas aledañas, han aumentado los atracos y arrebatones “con el tema de la distribución de cajas de comida también hay retrasos y por la situación económica hay familias que dependen de estos alimentos para su sustento, ya que los altos precios de los rubros de la cesta básica en los mercados y supermercados, hace imposible adquirirlos con el poco salario que se puede ganar en un mes”.

Con información de El Estímulo

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