El representante especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, declaró que el propósito de las sanciones contra una filial de la estatal petrolera rusa Rosneft es que el gobierno de Nicolás Maduro acceda a negociar comicios presidenciales, como mecanismo pacífico para salir de la crisis venezolana.
“Las sanciones son reversibles, la intención es que sean temporales. La meta es complicar al régimen de Caracas para que hagan algo que no han querido hacer: negociar elecciones libres y justas, y que Venezuela pueda emerger de esta crisis”, dijo Abrams durante una teleconferencia con periodistas, en la que participó.
El funcionario estadounidense afirmó que Rusia ha sido un aliado importante para mantener a flote al chavismo gobernante, por lo que espera que a partir del nuevo paquete de sanciones haya un “cambio de comportamiento” del Kremlin con respecto a Venezuela.
“Las elecciones presidenciales son la mejor manera de salir de este asunto pacíficamente. Estamos con la esperanza de que la Federación Rusa quisiera darle ese consejo al régimen de Maduro. No hemos visto esto todavía, pero sería una contribución muy positiva”, señaló.
El Departamento del Tesoro de EE. UU. dictó este martes 18 de febrero sanciones contra Rosneft Trading S. A., filial de estatal rusa homónima con registro en Suiza, y también contra el directivo que coordina sus negocios en Venezuela, el portugués Didier Casimiro. La agencia norteamericana acusó a la compañía de ayudar al gobierno socialista a sortear las sanciones que pesan sobre Petróleos de Venezuela (Pdvsa).
En concreto, según el Departamento del Tesoro, la compañía rusa había prestado servicios para transportar el crudo venezolano, embargado por EE. UU., a mercados internacionales en África y Asia por medio de una intermediaria en Panamá.
Al respecto, Abrams comentó que luego de las medidas del Tesoro las relaciones de la empresa rusa quedarán “bastante vulnerables”, pues confía que muchos aliados comerciales dejarán de mantener negocios con ella por temor a ser alcanzados por las sanciones estadounidenses.
Al respecto, Abrams comentó que luego de las medidas del Tesoro las relaciones de la empresa rusa quedarán “bastante vulnerables”, pues confía que muchos aliados comerciales dejarán de mantener negocios con ella por temor a ser alcanzados por las sanciones estadounidenses.
“Lo que hicimos ayer (martes) fue una acción específica, pero también una señal de que hay más acciones que se vienen. Le urgimos a los consumidores principales del petróleo venezolano en Asia que busquen en otro lado porque cualquier compañía prudente se alejará del negocio o comercio del petróleo venezolano”, afirmó.
Además, el enviado especial para Venezuela mencionó que su gobierno evalúa los efectos que ha tenido en materia ecológica y contra las poblaciones indígenas la extracción de oro en el Arco Minero del Orinoco. Aseguró que el régimen de Maduro lleva a cabo estas actividades de “comercio ilegal” de oro para comprar las voluntades de líderes militares.
“Lo hemos venido discutiendo en la ONU desde octubre, y lo discutiremos en las sesiones del próximo mes”, adelantó.
La Administración del presidente Donald Trump intensificó esta semana lo que cataloga como su campaña de “máxima presión” para arrinconar a Maduro y sus allegados cercanos, apalancado en su apoyo al jefe de la Asamblea Nacional (AN), Juan Guaidó, al que reconocen presidente interino de Venezuela.
Con información de El Pitazo