Mantener el uniforme blanco y limpio. Comer o trasladarse a sus sitios de trabajo es un sacrificio para los enfermeros en Venezuela. Un país donde insumos básicos como adhesivos son racionados para que ¨rindan¨y donde lavarse las manos quedó atrás por falta de agua.
La Presidenta del Colegio de Enfermeras de Caracas Ana Rosario Contreras denunció que la crisis se evidencia en la perdida de kilos de los trabajadores de la salud como consecuencia de salarios de miseria que perciben.
Contreras aseguró que el abandono de los hospitales es inminente. Informó que profesionales de la enfermería no están dispuestos a continuar laborando de manera gratuita. ¨No sean desvergonzados, no sean cara de tabla. ustedes no tienen porque exigir uniforme cuando en el seguro social nos dan uno de mala calidad, no tenemos como pagar transporte¨.
La representante de las enfermeras informó que inició una nueva fase de protesta del gremio para lograr reivindicaciones salariales. Recordó a la ciudadania y a familiares de los pacientes que los enfermeros no son ¨flojos¨.
¨No es que no queremos trabajar es que no tenemos como. Los enfermeros venimos a trabajar con los zapatos rotos y dejamos a nuestros hijos sin un plato de comida en la mesa¨.
Ana Rosario Contreras dijo estar dispuesta a asumir una posible destitución por alzar su voz de protesta. Informó que no será complice de lo que calificó como genocidio en salud por parte del régimen de Nicolás Maduro.
¨Si el Ipasme nos quiere destituir échenle pichón. Si nos siguen presionando le vamos a dejar los hospitales solos para que vean cuanta falta hace una enfermera en los hospitales de este país¨.
Con información de Caraota Digital