Según Ana Rosario Contreras, presidenta del Colegio de Enfermeras de Caracas, la situación de los trabajadores sanitarios ha «empeorado tanto que en vez de llevar comida lo que podemos es llevar un virus al hogar».
El más reciente informe sobre Venezuela de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), reveló que hasta el 11 de julio se había confirmado 212 casos positivos de covid-19 entre el personal de salud.
Luego de esta afirmación, desde el organismo internacional advirtieron que el alto contagio entre el sector sanitario venezolano se podría deber la limitada disponibilidad de Equipos de Protección Temporal (EPP) o el uso inadecuado de los mismo.
Médicos, enfermeras, dirigentes sindicales y personal obrero, han venido advirtiendo los riesgos a los que están expuestos, sobre todo en un escenario como el actual, cuando enfrentan sin recursos una nueva enfermedad, que llegó para agravar aún más la emergencia humanitaria compleja.
Ana Rosario Contreras, presidenta del Colegio de Enfermeras de Caracas ha elevado su voz en defensa de su gremio y de todo el personal, que considera esencial para el funcionamiento de los centros de salud, y a quienes se les han vulnerado sus derechos al máximo durante la gestión de Nicolás Maduro.
– ¿La crisis del sector salud venezolano nació con la pandemia por covid-19?
-En el sector salud se ha profundizado la emergencia humanitaria compleja que veníamos denunciando antes del primer caso de covid-19, condiciones que en el 2018 nos llevaron a convocar un paro en el gremio, y han sido la causa de diversas protestas durante los últimos años.
A partir de 13 de marzo cuando se decretó el estado de alarma por covid-19 se puso en relieve las condiciones del sistema sanitario, colapsado por la falta de atención.
– ¿Han sido útiles las medidas aplicadas desde la administración de Nicolás Maduro para detener la curva de contagios?
-Desde marzo cuando se anunció el primer caso hemos visto como de manera inestable se ha ido declarando cuarentena, flexibilización, vimos como los mercados de Coche, Quinta Crespo, San Martín permanecían abiertos mientras la curva de contagios iba en aumento, estos espacios estaban full, repletos de personas.
Vimos como las personas comenzaron a ver el tapabocas como un requisito obligatorio para ir a la calle y no como un suministro necesario para su protección, lo que dio cumplimiento al pronóstico de las Academias y dio paso para que llegáramos a agosto con un sistema sanitario colapsado, con hospitales repletos. Es lamentable que anoche (haciendo referencia al jueves 6 de agosto) estuvimos desde el gremio de enfermería buscando un cupo para una compañera con covid-19 y no lo conseguimos en ninguno hospital.
– ¿Por qué se están registrando tantos contagios entre el personal de salud?
-Todo el personal que labora en los hospitales necesita EPP, mascarillas N°95, batas quirúrgicas, equipos de alta seguridad, lentes protectores, guantes, pero lamentablemente esto no ocurre en nuestros centros de salud.
Hay casos en los que los directivos del personal quieren obligar a los trabajadores a usar hasta por dos semanas el mismo tapabocas, cuando es de uso único, cuando comienzan a humedecerse deben cambiarse inmediatamente porque son agentes contaminantes, pero hay centros donde quieren darles incluso tapabocas de tela, que para el personal de salud su efectividad es de 0%.
Somos el primer país de la región con más casos del personal de salud, en el gremio de enfermería han fallecido siente trabajadores con clínica (diagnóstico) de covid-19, para el personal de salud, hoy, a la emergencia humanitaria se le agregan condiciones de trabajo indecentes y de alto riesgo.
– ¿Tiene idea de cuántos trabajadores del gremio de enfermería están contagiados con covid-19?
-Nada más en el Distrito Capital el 6 de agosto se registraron 60 enfermeros positivos para el covid-19, el día antes 80 habían dado positivo. Dentro de los factores de la (OCHA) para los contagios entre el personal de salud está el uso inadecuada los EPP, mascarillas de muy mala calidad o posible uso de tapabocas de telas.
Desde el Estado no han entendido que si no nos cuidan y caemos contagiados quién va atender a los pacientes. Un tapaboca no es para usarlo una semana, como ocurre en el hospital El Algodonal, donde pretenden que en el servicio de pacientes con coronavirus usen una mascarilla dos semanas.
– ¿En qué centros de salud de Caracas se han registrado contagios del personal sanitario?
-Desde el 1 de agosto se han registrado muchos casos positivos de covid-19 en más de 23 hospitales de Caracas, sin contar ambulatorios o CDI, sin embargo, se les niega a algunos trabajadores la posibilidad de practicarse, aunque sea los test de detención rápida.
Solo en Caracas tenemos 300 trabajadores contagiados, en San Cristóbal tenemos enfermeras y médicos en terapia intensiva, incluso ya más de 20 médicos han muerto por esta enfermedad, en el sector salud somos una familia y perder cualquier integrante del gremio nos duele.
– ¿Cómo ha visto la asignación de ayuda humanitaria a través de un acuerdo entre representantes de la administración de Nicolás Maduro y la Asamblea Nacional?
-Desde la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Unicef y más reciente la Cruz Roja se han hecho entregas de algunos aportes. El primero dio 20 toneladas de insumos médicos y material de protección para el personal, el segundo cinco toneladas y así, pero cada aporte representa un grano de arena en el mar.
Nuestro sistema de salud no es fuerte, es muy débil. Además, advertimos que solo estos insumos han llegado a los hospitales designados como centinela, es decir, El Algodonal, Lídice, Hospital de Coche y Hospital Universitario de Caracas, pero resulta que casi todos los centros de salud en la ciudad están recibiendo a estos pacientes.
Por ejemplo, en el caso del HUC ya está colapsado, todas las unidades están colapsadas.
La semana pasada cuatro pacientes se murieron en El Algodonal, ahí no hay morgue desde hace años, por lo que los cuerpos permanecieron en un espacio al lado de la unidad de covid-19. El cadáver que menos duró estuvo 12 horas y el que más duró pasó 48 horas, y la respuesta de las autoridades hospitalarias era que estaban muy ocupados, imagínense el pánico que eso causó entre los pacientes y la incomodidad entre el personal, eso es un agente contaminante.
– ¿Cuál es la situación actual de los centros de salud en Caracas?
-La situación es deprimente y vergonzosa, tenemos el 60% de los hospitales sin agua, cómo nos duchamos para ir a nuestra casa, como se asean los pacientes, como nos lavamos las manos, esta última una de las recomendaciones más importantes de la OMS para evitar la propagación de este virus.
Este es un momento para la vida y aquí todos los interesados deberían asumir responsabilidades, toda la crisis la estamos llevando nosotros sobre los hombros por vocación, porque no lo hacemos por el salario.
Nuestra situación ha empeorado tanto que en vez de llevar comida lo que podemos es llevar un virus al hogar.
Además, nos amedrentan, y es así como vemos la militarización excesiva de los hospitales, los equipos no pueden estar en resguardo de alguien que no está, la burocracia es excesiva y el control innecesario del material, todo eso impide cumplir con los protocolos, afectando la vida y salud del personal sanitario.
– ¿Ha migrado el personal sanitario por miedo al covid-19?
-Todos los días se reportan renuncias, sobre todo de médicos y enfermeras, quienes son los que están en la primera línea haciendo frente a la pandemia sin recursos. Esto ha generado una migración laboral, los trabajadores se están dedicando a nuevos emprendimientos, hoy los venezolanos estamos velando por garantizar nuestra vida.
Los trabajadores del sector salud estamos pagando para trabajar. Sí, también se ha dado una migración al sector privado, que, aunque no paga realmente lo que requiere el personal sí paga más. El año pasado pedimos un salario de 600 dólares y esto fue ignorado.
Hoy en el sector salud una enfermera nueva cobra alrededor de tres dólares al mes, qué se hace con eso, qué compran con eso, mientras que en el sector privado pagan un poco más, rondando los 12 millones.
Pero esta migración también representará un problema cuando la pandemia acabe y ya no se requiera tanto personal.
– ¿Qué llamado hacen en este momento, justo cuando la curva de contagios está aumentando?
-El llamado es a informar a la poblacion y al personal, esto no pasó en los hospitales del país en los cuatro meses que tuvieron de gracia las autoridades, solo dieron indicaciones al personal que labora en los centros centinelas, mientras que el resto quedó a la deriva, sin embargo, como todos no sé formo el personal solo de los hospitales centinelas, es por eso que desde el gremio de enfermería estamos trabajando sobre la marcha.
Gracias a Dios somo un gremio muy estudiado y contamos con personal, médicos y enfermeras que están fuera del país, ellos no han ayudado no solo con recursos sino con indicaciones, ya ellos pasaron por esto.