Más de 4 mil 900 personas de escasos recursos fueron perjudicadas en Anzoátegui, tras el cierre de ocho comedores populares.
El denuncia la hizo el diputado a la Asamblea Nacional (AN) Carlos Andrés Michelangeli, quien explicó que esos expendios de comida «quedaron en completa desatención desde el año 2016, pese a la crisis alimentaria que vive el país».
El parlamentario, consideró que la inversión de William Saab «fue una dinero perdido y todos los comedores fueron desvalijados y muchos son guaridas de delincuentes, por lo que exigimos que sean reactivados de manera inmediata», manifestó.
Michelangeli expuso que hizo un recorrido por los municipios Simón Bolívar, Juan Antonio Sotillo, Urbaneja, Miranda, Freites, Anaco, Guanipa y Simón Rodríguez, donde están ubicados esos centros de provisión de alimentos y constató el cierre de cada uno de ellos.
«El pueblo se muere de hambre y el Gobierno abandona los comedores populares y nos encontramos que aún hay ciudadanos que van todos los días a esas instalaciones, con la esperanza de que sean activados. Ahora se inventan unos Comités Locales de Abastecimiento que son un fracaso y el Estado se niega a reconocer que hay hambre en la población», sostuvo.
Además, el funcionario aseguró tras un recorrido por las zonas norte, sur y centro de la entidad pudo constatar que hay una «emergencia por hambre» en la localidad y que el 20% de la población realiza sólo una comida al día. «Es alarmante, estamos hablando de que nuestro pueblo, como nunca antes, está pasando hambre. Además de la desnutrición estamos en una crisis humanitaria que se traduce en enfermedades, incluso reaparecen patologías ya erradicadas en el país, ausentismo escolar, déficit de aprendizaje, entre otros factores de gravedad», dijo.
Michelangeli, alertó además que la mala alimentación está generando muertes en las madres anzoatiguenses y en sus hijos, dijo que sólo en el mes de enero nueve mujeres murieron en la entidad tras haber dado a luz y no contar con los recursos necesarios para cubrir la dieta básica. «Esto demuestra que la falsa revolución hace esas misiones con el único interés que es el político electoral y no para que se mantenga en el tiempo, con planificación y recursos asignados año tras año», expresó.
Con información de: El Universal
Fecha: 10 de marzo de 2017