Gobiernos y dirigentes de otros países vuelven a solicitar la inmediata liberación de los presos políticos
Los miles de venezolanos que participaron en la Toma de Caracas, que convocó la Mesa de la Unidad Democrática, lograron el impacto necesario para que gobiernos y políticos de todo el mundo se pronunciaran sobre Venezuela. A pesar de los impedimentos que el gobierno nacional efectuó para evitar la manifestación y su cobertura, las imágenes que llegaron al resto de los países evidenciaron el descontento de la población. La apuesta va dirigida a activar el proceso revocatorio para que se lleve a cabo este año y proponer soluciones con el fin de evitar que se agrave más la escasez de medicamentos, alimentos y la inflación que el Fondo Monetario Internacional proyecta en 720% para 2016.
El ex presidente estadounidense, Jimmy Carter y el secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, fueron los primeros en fijar posición. El mismo día de la marcha, luego de una reunión que tuvieron en Georgia, Estados Unidos, para intercambiar opiniones sobre derechos humanos y democracia en la región, emitieron un comunicado en el que felicitaron la masiva manifestación de la oposición: “La demostración pacífica del pueblo venezolano el día de hoy en Caracas reafirma la voluntad de la gente para una salida democrática en el contexto del referéndum revocatorio”.
Exigieron la inmediata liberación de los presos políticos y reclamaron directamente al Consejo Nacional Electoral convocar al revocatorio antes de que termine este año, ya que es su responsabilidad “que esta instancia de expresión popular se celebre en los plazos debidos”.
La Cancillería del gobierno español concuerda con Carter y Almagro. En un comunicado emitido ayer también calificó de urgente la ejecución de un referéndum en 2016 para revocar al presidente Nicolás Maduro. Señaló que la Toma de Caracas, en la que la oposición calcula que se manifestaron aproximadamente un millón de personas, demuestra el “apoyo popular a la vía del revocatorio”.
El texto agrega que se debe considerar esta jornada como un “nuevo impulso para un muy necesario diálogo entre el gobierno y la oposición”, de tal forma que se dé una “auténtica reconciliación” y la liberación de los presos políticos.
Alianza prorrevocatorio. La Mesa de la Unidad Democrática le solicitó al presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, que lidere una alianza de países para impulsar el cambio político en Venezuela. Desde Lima, el ex diputado con asilo, Óscar Pérez, confirmó que los dirigentes opositores destacaron que se trata de una coalición independiente de otros organismos regionales como Unasur.
Pérez aseguró que, durante reuniones privadas con el mandatario peruano, los líderes de la oposición expresaron su preocupación con respecto al uso de la violencia por parte del Estado venezolano para reprimir las concentraciones que difieren del sistema político de Nicolás Maduro. A su vez, señaló que la intención de crear esta alianza en contra del actual gobierno se fundamenta en respetar la Constitución y terminar con la “grave crisis económica y humanitaria” que afecta a todos los sectores sociales del país.
RECUADRO
Francia le exige justificación al gobierno
A través de un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia solicitó explicaciones a las autoridades venezolanas por impedir que la periodista y corresponsal en Colombia del diario Le Monde, Marie Delcas, ingresara al país el miércoles 31 de agosto para cubrir la manifestación de la oposición.
El director del periódico, Jérôme Fenoglio, describió la medida como “intolerable”. Enfatizó que Le Monde “protesta contra esta traba a la libertad de informar” e inmediatamente demandó que todos los representantes extranjeros debieron ser autorizados a entrar a Venezuela para ejercer sin impedimentos su oficio.
Romain Nadal, portavoz del Quai d’Orsay, declaró que el deber del gobierno venezolano es “respetar la libertad de prensa y la libertad de opinión, acabar con las restricciones al trabajo de los periodistas y garantizar la seguridad de los medios y sus trabajadores”.
Delcas no fue la única periodista expulsada. John Otis, corresponsal de la radio estadounidense NPR; César Moreno, de la radio colombiana Caracol; Dora Glottman, periodista colombiana; otro corresponsal del Miami Herald y un equipo de la cadena Al Yazira tampoco tuvieron acceso al país para cubrir la Toma de Caracas.
FUENTE: EL NACIONAL
03 DE SEPTIEMBRE DE 2016