Afirman que 2016 fue crítico para la ejecución de proyectos.
De los tres años de ejercicio, para los alcaldes del Área Metropolitana 2016 tiene la particularidad de ser el año más complejo en materia presupuestaria, una dificultad que para la mayoría de los ayuntamientos se tradujo en recortes de proyectos urbanos y obras. De cara al 2017, los ejecutivos locales advierten que no estarán al margen de la crisis y la inflación, que han ocasionado un déficit presupuestario que los gobiernos sitúan entre 70 y 88%.
A propósito de la coyuntura, David Smolansky, mandatario de El Hatillo, señala que para el próximo año los planes de obras serán más limitados. A modo de balance, indica que este año su administración adelantó la primera fase de TransHatillo, una ruta rural pionera en la urbe, cuyos usuarios ven cuesta arriba toda posibilidad de ampliación. Actualmente el servicio, que cubre zonas como Gavilán y La Mata, dispone de seis unidades, pero los pasajeros aseguran que se requiere el doble de vehículos. Para este próximo lapso apenas está prevista construcción de paradas, dijo el alcalde.
«Para 2017 se aprobó una Ordenanza de Presupuesto de 7 mil 200 millones de bolívares, que en octubre equivalían a 7 millones de dólares, ahora estamos hablando de dos millones de dólares», dijo Smolansky, quien se refirió a la incorporación de dos ambulancias al servicio Hatillo salud.
José Luis López, director de la alcaldía de Sucre, indicó que se han redoblado esfuerzos para mantener las meriendas escolares en 13 de las 46 instituciones locales. Señaló que para el primer semestre de 2017 tienen previsto incluir 7 nuevos recintos. «Pese a la ausencia de proveedores y costos, 4.600 niños se benefician»,dijo.
López advierte que en lugar de asignar 43% de sus ingresos al pago de personal, el próximo año tendrán que destinar 73%. El problema envuelve a los cinco municipios del Área Metropolitana e impide planificar grandes obras. Solo este año Nicolás Maduro anunció cuatro aumentos de salario.
En Chacao la coyuntura pone en cuestión la culminación de la plaza El Inmigrante, que data de 2012 cuando el entonces alcalde Emilio Graterón colocó la piedra fundacional en el casco central. El proyecto de 11 mil 100 m2, similar a la plaza Los Palos Grandes, tendrá que estar totalmente listo en 2017, prometió el alcalde Ramón Muchacho en abril de 2015. Pese a ello, los vecinos perciben con incertidumbre el avance de la obra.
En 2016 la administración de Muchacho recuperó las plazas Las Morochas, en Altamira, renovó la Bélgica, en La Castellana, y la Juan Pablo II. En Distrito Capital se anunció Caracas Bella Socialista, plan que pretendía colocar «21 kilómetros de asfalto» en las principales vías, recuperar 50 canchas y 673 consultorios. En días pasados alcaldes de distintos municipios acudieron a la Vicepresidencia para exigir al Ejecutivo el pago de recursos. En Sucre hay dos grandes obras que están sujetas a un mínimo de estabilidad: el patio de transferencia de basura en el K12 de la Petare-Santa Lucía y las escaleras mecánicas de Mesuca.
FUENTE: EL UNIVERSAL
FECHA: 19 DE DICIEMBRE DE 2016