La crisis por las constantes fallas en el servicio de agua que se vive en el estado Lara se ha intensificado en los últimos días, situación que ha puesto en aprietos a varias comunidades, pues los vecinos afirman que no disponen de los recursos económicos suficientes para comprar agua cada dos días a los camiones cisternas. Ciudadanos aseguran que los entes encargados no dan respuesta a sus necesidades.
Más de 500 familias del sector Brisas del Aeropuerto, en la ciudad de Barquisimeto, perdieron la paciencia y salieron a protestar tras permanecer 45 días sin agua y sin respuestas por parte de los organismos responsables de solventar el problema. Aunque los vecinos tratan de resolver la situación como pueden, ya el dinero no les alcanza para comprar agua, comida y gas.
Elena Camacaro, habitante de Brisas del Aeropuerto, hizo un llamado a las autoridades larenses para que les brinden soluciones a la problemática.
Tenemos más de un mes sin agua y no podemos estar comprando cisternas a cada rato, porque no tenemos dinero para estar pagando cada dos o tres días. Necesitamos soluciones a las necesidades, que son las necesidades del pueblo, y este señor que está en la gobernación no ha hecho nada”, declaró Camacaro al equipo de Crónica.Uno.
La vecina sugirió que, si el actual gobernador encargado del estado Lara, Adolfo Pereira, no sabe dónde queda la comunidad, se informe y sepa que se encuentran al lado del aeropuerto de Barquisimeto.
No tenemos gas, no tenemos agua. Necesitamos respuestas a estos problemas, porque así como andan en campaña para las elecciones del 21 de noviembre, necesitamos que se dediquen a trabajar y resolver las necesidades de la gente”, sostuvo.
Camacaro alertó de que hay vecinos enfermos por tomar agua de lluvia, entre ellos, personas de la tercera edad y niños.
Rafael Betancourt, habitante del sector Barrio Obrero, ubicado también en el oeste de Barquisimeto, refirió que la grave crisis que padecen por las fallas de todos los servicios públicos se agrava con la falta de agua. Afirmó que el gobierno regional no resuelve ninguno de los problemas que enfrentan las comunidades.
El agua, la electricidad, el gas, la gasolina, las medicinas, el alto costo de los alimentos. El ingreso de los venezolanos es pírrico. Todos esos males se incrementan en la situación que estamos viviendo nosotros de no tener agua en estos momentos”, destacó Betancourt.
Afirmaron sentirse burlados ante las infinitas promesas que ha realizado el gobernador de esta región, pues, de acuerdo con los vecinos, el alto funcionario siempre pone alguna excusa. Además, indicaron que las autoridades tampoco se toman la molestia de anunciar la razón por la cual no tienen agua.
Han caído unos palos de agua inmensos y deben estar rebosantes las represas, no entendemos la razón por la cual no nos suministran el agua. Estamos en una situación caótica por la COVID-19, no nos podemos bañar bien, no podemos lavar los alimentos y, de paso, tenemos que comprar a los camiones cisternas, pero es caro, pues, además, tenemos que pagarlos en dólares”, se quejaron los vecinos.
Privilegiados
Los vecinos denunciaron que los camiones cisternas que mandan desde la Alcaldía de Barquisimeto o la gobernación son para unos pocos privilegiados e, incluso para los manzaneros, quienes en teoría serían los encargados de repartir el agua en las casas.
María Morales, también residente de Brisas del Aeropuerto, denunció que dichos manzaneros reparten el agua a quienes ellos escogen, bien sea por filiación política o por otra razón que no entienden, pero el recurso no les llega a todos.
Esta situación ha afectado no solo a la señora Morales, quien tiene 77 años y un nieto recién nacido que debe cuidar, sino a más de 500 familias que residen en la zona y que salieron a protestar, ya que no soportan estar tantos días sin agua y sin respuestas de los organismos responsables de solventar esta situación.
Tal es el caso de la señora Ligia Pérez, también vecina de la zona, quien afirmó que ya no pueden con la situación, porque la mayoría de los habitantes del sector cobran sueldo mínimo, es decir, 7 millones de bolívares, y llenar un tanque de 120 litros les cuesta tres dólares, monto que deben pagar cada dos días.
“El que compra agua no puede comprar comida, y esperamos que nos resuelvan esto ya que las próximas acciones será trancar la calle, porque no podemos esperar más y los manzaneros no buscan cisternas gratis para toda la comunidad, pero para ellos sí las consiguen gratis”, finalizó.
Con información de Crónica Uno