El comisionado presidencial para Asuntos Exteriores, Julio Borges, calificó como positivo la participación de la delegación de Juan Guaidó en la Asamblea General de las Naciones Unidas y afirmó que esto derivará en una mayor presión internacional sobre el chavismo gobernante.
«Nos encontramos en un punto de suma importancia, momento en el cual tiene que abrirse un camino de la presión diplomática para lograr el desenlace de la dictadura«, dijo Borges, al ofrecer un balance.
Durante esta semana de la sesión de la Organización de Naciones Unidas (ONU), los representantes de la presidencia encargada -el diputado Miguel Pizarro, el embajador ante Estados Unidos, Carlos Vecchio y Borges- sostuvieron reuniones con cancilleres de distintos países y presidentes de la región, en seguimiento a la ruta de presión diplomática que continúan.
«Toda la América tiene como preocupación lograr un cambio político en Venezuela. No podemos permitir que sea una segunda Cuba, sino lo que siempre fue, una referencia de democracia, de paz social», dijo.
Borges reiteró su llamado a presionar a la administración cubana, principal aliado del chavismo, para lograr apartar a Nicolás Maduro del poder. «Ejerzamos toda la presión sobre la dictadura cubana. Cuba es la que mantiene a la marioneta de Maduro en el poder».
Además, advirtió que «quienes respaldan a la dictadura de Maduro, el mundo entero va a seguir creciendo en apoyo al Parlamento y a Juan Guaidó».
También, en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, se aprobó comisión de investigación independiente e internacional sobre posibles violaciones de derechos fundamentales en Venezuela. Borges afirmó que esto expondrá en mayor detalle la violación a estos derechos.
«Significa que más allá de la denuncia, se va a investigar los casos concretos y se harán los procesos judiciales contra los violadores de derechos humanos. Es un impulso no solo al que denuncia sino al castigo».
En la votación para aprobar esta comisión de investigación, fueron 19 votos a favor, siete en contra y 21 abstenciones, entre ellas las de México y Uruguay. Borges apuntó a que esto refleja que el chavismo se aísla de la comunidad internacional.
«Países que la dictadura sentía que le pertenencia, han tenido abstenciones importantes, México Sudáfrica, Uruguay, no tomaron una posición a favor de la dictadura de Maduro que cada vez se convierte más tóxica».
Además, Borges calificó como «una delegación mediocre» a los representantes de Maduro ante la asamblea general de la ONU y afirmó que «nadie quiso recibirlos, incluso en los pasillos donde se encontraban con cancilleres, (Jorge) Arreaza los perseguía para tomarse una foto»
El canciller del presidente encargado, reafirmó la denuncia de presuntos grupos irregulares en territorio venezolano amparados por la administración de Maduro.
«Es un problema global, maduro no es una dictadura una santuario de protección de terrorismo internacional real, no a futuro, para todas las democracias en la región», expresó.
En cuanto a las recientes sanciones anunciadas por la Unión Europea hacia siete funcionarios del chavismo gobernante, señalados de violadores a los derechos humanos, por el asesinato del capitán Rafael Acosta Arévalo,
Estas sanciones es que no son a los altos jerarcas, eso vendrá, son sanciones en la cabeza de los torturadores en los distintos cuerpos de inteligencia, y policía política. Es un mensajes muy claro, cualquier persona que esté envuelta en crímenes de derechos humanos, van a ser investigados y castigados.
Con información de Efecto Cocuyo