Se avizora un amargo futuro en un dulce país sin azúcar, advirtieron los cañicultores del sur del estado Portuguesa, durante una concentración convocada para protestar frente a la gobernación en Guanare, en el centro occidente venezolano.
Representantes de las sociedades de cañicultores de Sabana Dulce (Socadulce), del Central Azucarero Toliman (Socatol) y de la Asociación de Azucareros de Guanare (Asapagua) rechazaron,, mediante un documento, “las importaciones desleales, la política hambreadora de precios y la inexistencia de incentivos a la producción nacional”.
De acuerdo con la Federación Nacional de Asociaciones de Cañicultores de Venezuela (Fesoca), en la zafra 2017-2018 solo se logró moler sobre las 3,5 millones de toneladas de caña (segundo nivel más bajo de los últimos 19 años), obteniendo 240.000 toneladas de azúcar, lo que representa solamente alrededor de 25 % de la demanda nacional.
El documento refiere que durante el año 2018, el Gobierno importó aproximadamente 600.000 toneladas de azúcar de Guatemala y otros “países aliados”.
Los productores de caña de azúcar calculan que para satisfacer plenamente la demanda interna del rubro con producción nacional deberán cosechar 15 millones de toneladas de caña de azúcar, con un rendimiento en molino de 8 %.
Para lograr esta meta, dijeron que precisan tener en campo alrededor de 250.000 hectáreas plantadas. Con la zafra iniciada con 20 días de retraso el pasado mes de diciembre, y que debe concluir en abril, escasamente lograrán cosechar cerca de 70.000 hectáreas, 2.5 millones de toneladas de caña, con un rendimiento en molino menor a 8 %. Dijeron que la razón de esta situación, entre otros factores, es que los cañaverales no han sido fertilizados, debido a que los agricultores no han tenido acceso a dichos insumos.
De acuerdo con los planteamientos de los gremios, adicionalmente, 60 % de los núcleos de cosecha (incluyen máquinas cosechadoras, gandolas para movilizar la cosecha, transporte y personal especializado) no cuentan con los equipos óptimos por falta de repuestos, combustibles y lubricantes.
Advierten que ello suma un riesgo adicional que podría generar que parte de los campos no puedan ser cosechados antes del inicio de las lluvias, quedando diferidos para la zafra 2019-2020.
Los representantes de la Central Azucarero Toliman (Socatol) indicaron que, según las proyecciones, sólo se producirá 20 % del azúcar que demanda el país. “Habrá que adquirir en el mercado externo cerca de 950.000 a 1 millón de toneladas para cubrir satisfactoriamente la demanda interna de 2019. Es decir, la importación de azúcar representaría la erogación de aproximadamente 400 millones de dólares”, dijeron.
Señalaron que es imposible que esta cifra se pueda cubrir, considerando la caída en el ingreso de divisas, debido a la caída en los niveles de producción petrolera y la baja en su precio en el mercado internacional, agrega el gremio.
Con información de El Pitazo