Los brotes de sarampión son cada vez mayores, a pesar de la negativa del Ministerio de Salud y el gobierno de Nicolás Maduro de reconocer que en el país existe una crisis sanitaria que tiene a la nación al borde del abismo por las políticas públicas erradas que han implementado.

En el Hospital Dr. Domingo Luciani, los trabajadores del área de pediatría confirmaron la llegada de pacientes con señales de sarampión. Los síntomas de esta enfermedad son: fiebre alta, tos, nariz moqueante, conjuntivitis y sarpullido en la piel, estas dos últimas son las que terminan por confirmar los casos, a pesar del empleo de exámenes de laboratorio que se encuentran bajo el control del área de epidemiología de ese centro de salud, los cuales no son revelados ni a los residentes, a pesar que estos lo solicitan.

Estos pacientes comenzaron a llegar desde finales de abril de 2018 y van en aumento. “El lunes le dimos de alta a un niño que estaba en el área de aislamiento con otros dos (casos) sospechosos”.

Aunque el personal habla de esta área como una zona para aislamiento, aseguran que la misma no tiene las condiciones idóneas para establecer cuidados de este tipo al paciente. “Una habitación de este tipo requiere de ventilación aislada para que no haya ningún tipo de contaminación. Nosotros deberíamos usar una máscara especial que creo no hay en ningún hospital de Caracas, pero tratamos de usar los cuartos para simular el aislamiento y mantener las condiciones”.

A pesar de los intentos por combatir enfermedades como ésta, uno de los informantes detalló que hay un grave déficit de vacunas y medicinas en el hospital, “especialmente de antibióticos”. Los laboratorios no funcionan y desde hace dos meses reactivaron uno para realizar perfiles hematológicos. Sin embargo, todo lo que requiera de pruebas químicas es imposible.

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) publicó un informe que reveló que entre enero y mayo de 2018 Venezuela ha presentado 904 casos, cuyo brote inició en el estado Bolívar, detalló el diputado de la Asamblea Nacional (AN) José Manuel Olivares.

En el Luciani los casos fueron tantos que la directiva declaró un protocolo de emergencia en el que restringieron el acceso al área de pediatría. Este 20 de junio llegaron tres casos sospechosos, pero la llegada de un niño con graves quemaduras llevó a los médicos a negar la estadía a dos y a remitir a uno a otro centro hospitalario, puesto que el quemado ocupaba la sala de aislamiento.

Con información de El Estímulo

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