Una inversión aproximada de $ 3 mil millones en tres años continuos, amerita la mecanización del trabajo en el campo, lo que garantizará el impulso de la producción agrícola, en las proporciones que el país lo necesita. Así lo considera Erich Hartkopf, presidente de la Cámara Venezolana de Distribuidores de Repuestos, Equipos Pesados y Agrícolas (Cavedrepa).
Indicó el vocero de este organismo que los intentos que se están adelantando para echar a andar la agricultura son importantes, pero agregó que se ha desatendido todo lo que tiene que ver con la necesidad de reponer la maquinaria agrícola, principalmente los tractores y las cosechadoras, sostuvo Hartkopf.
“El año pasado cayó la producción de azúcar, por ejemplo, y esto ocurrió por falta de cosechadoras. Si hacemos un inventario de las unidades que se encuentran en condiciones aceptables para el trabajo del campo, alcanzamos a entre 15.000 y 20.000, cuando en el país se requieren al menos entre 80.000 y 100.000 máquinas entre tractores, cosechadoras y otros equipos”, contabilizó.
Explicó que lamentablemente no han sido invitados a las reuniones del Consejo Nacional de Economía Productiva, y cree que en las conversaciones no están participando todos los actores involucrados.
“Se debe actualizar el parque automotor, es imprescindible. No sólo es cuestión de repuestos, son máquinas con tecnología ya caduca. La vida útil de estos equipos es de 10 años. La última gran importación de estos equipos se hizo entre el 2007 y el 2008. Es importante que eso se tome en cuenta, muchos están inútiles porque le faltan piezas claves”.
Estima necesario que se diseñe una política coherente y que perdure en el tiempo, orientada a una importación específica de la maquinaria que se necesita para apalancar a los productores.
“Es importante hacer un estudio serio, y para reponer ese parque incorporar la Banca para apoyar a quienes deseen invertir en las condiciones que se nos ofrecen en el país. En un año no se resolverá el problema pero si se toman las decisiones adecuadas en tres o cuatro años veremos los frutos”, aseguró.
FUENTE: EL UNIVERSAL
02/09/2016