Haciendo de tripas corazón para evitar que las ventas caigan por completo se encuentran los comerciantes de los municipios foráneos de Lara por los racionamientos eléctricos, los cuales pueden llegar a ser hasta de 5 horas por lo que no pueden cumplir sus jornadas laborales.
Lorena Rojas | La Prensa de Lara
Representantes de las cámaras de comercio de Jiménez, Morán, Torres y Palavecino aseguran que se les ha hecho cuesta arriba mantener los locales abiertos, debido a que al irse la electricidad los productos que son refrigerados se calientan o se dañan y en el caso de los puntos de venta se pierde conexión.
«Los racionamientos los hacen en jornadas laborales y aunque algunos comercios usen bombillos recargables para seguir trabajando, se encuentran con el problema de las conexiones, las señales son débiles porque las antenas también se quedan sin electricidad, por lo que los puntos de venta dejan de funcionar», dijo Samuel Medina, presidente de la Cámara de Comercio de Palavecino.
Asimismo, presidentes de las cámaras señalaron que además de verse afectados por la cantidad de horas en las que están sin el servicio los comercios también se han visto muy golpeados, porque los aparatos eléctricos se les han dañado a causa de las diversas fluctuaciones.
Con información de La Prensa de Lara