El panorama está claro. Con el cobro de las nuevas comisiones bancarias se golpea aún más el poder adquisitivo de los venezolanos, las entidades reciben ingresos muy por debajo de lo que requieren y la crisis del sector no se soluciona. Todo indica que desde el Gobierno se siguen tomando las medidas equivocadas.
Así lo alertó el diputado a la Asamblea Nacional (AN), José Guerra, para quien el problema es de fondo. “Todo tiene que ver con la profunda recesión económica que enfrenta el país. Los bancos son un claro reflejo de eso”.
La situación es tan crítica que para el cierre del primer semestre la actividad crediticia, que es la que mayores ingresos aporta a las instituciones financieras por el cobro de los intereses, cayó 30%. “La actividad bancaria está entrampada. Por eso se busca reducir costos con acciones como el retiro de la mayoría de los cajeros automáticos. Es lógico que hagan eso y más”.
La economista Tamara Herrera coincidió. Aseguró que la reducción en los créditos es una expresión del deterioro económico y la insuficiencia e incapacidad de la banca para atender a la economía. “Las instituciones no logran hacer los financiamientos requeridos en términos reales porque necesita esfuerzos de capitalización y que los acreedores estén en condiciones de fortaleza y de pago de las deudas, y eso no es así en la actualidad”.
El respiro
El sector requiere un respiro. Y eso solo será posible con una transformación del cono monetario con billetes de mayor denominación. “Cualquier ciudadano puede imaginarse lo que puede representar el traslado, custodia y almacenamiento de billetes si a quienes cobran la pensión, si no tienen suerte de recibirla en billetes de 100 bolívares, sale con un saco de dinero del banco sin ser millonario”.
Herrera explicó que 10% de la liquidez monetaria el país está en efectivo, lo que es igual a 500 billones de bolívares en monedas y billetes en circulación, lo que implica gastos que se están convirtiendo en imposible de ser asumidos.
FUENTE: El CARABOBEÑO