Adquirir productos de la línea blanca en la economía actual, es un acción “imposible de lograr”.
El desfase entre los precios y el poder adquisitivo es tan alto, que pare que un venezolano que devengue sueldo mínimo pueda comprar la nevera más básica y sencilla del mercado, deberá trabajar más un año sin gastar ni un solo bolívar, reseña diario de circulación nacional.
Esta realidad se repite con los demás productos, convirtiendo los más básicos en todo un lujo para la familia promedio venezolana. Un ventilador tiene un costo de Bs. 40.000, una nevera un alarmante valor de 355.350 (más de 16 meses de sueldo), una lavadora Bs. 264.816. Y para cancelar un televisor, hay que desembolsillar nada menos que Bs. 435.354.
¿Cómo puede costearse un venezolano una línea blanca, cuando el sueldo pasará a estar apenas encima de los Bs. 22.000 mensual?
Por su parte los comerciantes aseguran que hace tiempo dejaron de vender marcas reconocidas por otras cuyos precios puedan ser considerados por los consumidores. Mientras que los pedidos disminuyen, debido a que existe poca rotación del producto.
FUENTE: SUMARIUM
18 agosto, 2016