A juicio de expertos en el área educativa, la medida publicada en la Gaceta Oficial número 41.044 del pasado 2 de diciembre presenta cambios en cuanto a la evaluación de los estudiantes, los horarios y la agrupación de materias en áreas de formación.
La analista de políticas públicas en educación, Olga Isabel Ramos, explicó que la resolución 143 establece en su artículo 12 que obtendrán el título de bachiller los estudiantes que cumplan los requisitos especificados en el plan de estudios, sin embargo, en el artículo 8 solo se hace mención al cumplimiento de las horas semanales, 44 en las instituciones con turno integral o alterno y 34 en liceos con jornadas de medio tiempo.
“En la resolución lo que dice es que se debe cumplir el plan de estudios, el plan de estudios fija las horas de cada área común o grupo estable. Ese es un gran defecto de la resolución, tu no puedes decir que la persona adquiere el titulo de bachiller por haber cursado una asignatura esa cantidad de horas. Las preguntas que yo haría al ministerio son: ¿Eso significa que la evaluación no existe? ¿Entonces yo paso la asistencia diaria y solo debo revisar si el estudiante cumplió con las 44 horas semanales en un liceo integral durante los cinco años?”, expresó.
Consideró que el artículo 8 genera discriminación en cuanto a la cantidad de tiempo que estudian los jóvenes y reduce las jornadas dependiendo del tipo de liceo.
Ramos advirtió que la resolución suscrita por el Ministerio para la Educación evidencia la falta de criterio sobre determinadas regulaciones. “Eso es una aberración en términos generales”, aseveró luego de denunciar que se está relegando la evaluación a la asistencia semanal.
Además, destacó que aunque no se fijó una escala de evaluación infiere por las declaraciones oficiales que se mantendrá del 1 al 20, diferenciándose de la educación de adultos, donde seguirá siendo del 1 al 5. “La escala permite tener grados para diferenciar los niveles del desarrollo del conocimiento, aprendizaje y desarrollo de las capacidades. Lo que define si la evaluación tiene cambios sustanciales o no son los criterios que se utilizan para su calificación“, sostuvo.
Por último, manifestó que el “error garrafal” de la reforma curricular es establecer la carga académica en “áreas de formación” sin fijar sus respectivos programas. “Tu deberías tener un perfil de conocimientos adquiridos, competencias y capacidades desarrolladas, programar como vas a programar al principio del año escolar y como vas a evaluar”, concluyó.
FUENTE: REPORTE CONFIDENCIAL
FECHA: 20 DE DICIEMBRE DE 2016