El secretario de Educación Miranda, Juan Maragall, manifestó con los 20 millones de dólares que utilizó el Gobierno nacional para el ejercicio militar Independencia II-2016, se pudo dar alimentación por un año a 600 mil estudiantes de educación básica del país.
“Un Gobierno responsable tiene que tener prioridad, y la prioridad son los niños y la alimentación. En vez de utilizar ese dinero en ejercicios militares innecesarios, debió destinarlo a la carencia que tienen los infantes. Actualmente, nuestro Plan Mipae atiende a 102 mil alumnos en toda la entidad, es decir, que esa cantidad hubiera alcanzado para la alimentación escolar de los tres estados más grandes de nuestro país por un año”, dijo.
Lamentó que el Gobierno central ignore las prioridades que hay en el país. “Con esa cantidad de dinero se pudiera completar los recursos de nuestro programa de alimentación para el resto de año, inclusive pudiéramos mantenerlo abierto durante las vacaciones para proveer de alimentos a los alumnos de las comunidades que más lo necesitan. También se pudiera dotar las cocinas con los equipos necesarios. Inclusive, quedaría dinero para reactivar el programa de dotación de útiles escolares con la entrega del bulto, equipado con sus libros, cuadernos, útiles, lápices, reglas, creyones, y quedaría para la dotación de las escuelas, tales como sillas, mesas, bebederos, pizarrones, escritorios”.
Por su parte, el secretario de Infraestructura Miranda, Octavio Salinas, manifestó que los recursos del ejercicio militar se pudieron haber construido aproximadamente 10 escuelas tipo modular, o reparar o ampliar unas 100 edificaciones educativas.
“Si ponemos esa cantidad de dinero y lo multiplicamos por 500 bolívares tipo tasa Dicom (actualmente está en 452 bolívares), nos daría la cifra aproximada de 10 mil millones de bolívares. En la actualidad, la construcción de una escuela nos costaría mil millones de bolívares, por lo que se pudieran fabricar 10 nuevas instalaciones educativas, cinco nuevas estaciones de policía, cinco estaciones de bomberos y repararse todas las estaciones de ambos organismos de seguridad”, dijo.
Detalló que con esos recursos se pudo mejorar el sistema de suministro de agua en las parroquias Filas de Mariche, La Dolorita, Caucaguita y en varias comunidades de Valles del Tuy, obras en la que más de 30 mil personas pudieran mejorar su calidad de vida. “También se pudo reparar las infraestructuras de las 38 casas de abuelos de Miranda y construir 10 más, y se pudo haber reparado más de 100 kilómetros de vialidad agrícola y rural. Si ese dinero hubiese llegado a Miranda podríamos haber construido y recuperado de 200 espacios deportivos”.
Mientras que la directora de Salud Miranda, Maggia Santi, dijo que con esos 20 millones de dólares, se podrían haber construido cinco Pronto Socorro y dos Centros de Especialidades Médicas Odontológicas (Cemo), espacios que estarían dotados con equipos de última generación, material médico, mobiliarios, camillas, y en la que también se pudiera pagar por un año completo a todo el personal médico, administrativo y de seguridad de dichos centros de salud.
“Cada tres meses se requieren de 150 millones de bolívares para la compra de medicamentos de enfermedades crónicas. Saneamiento Ambiental requiere dinero para la adquisición de químicos y materiales para realizar jornadas de fumigación, debido a que actualmente hay brotes de vectores que trasmiten enfermedades de dengue, Zika e incluso malaria, pero este gobierno prefiere gastar esta gran suma de dinero en un ejercicio militar en vez de destinarlos al cuidado de la salud del pueblo mirandino”, concluyó.
Prensa Miranda / Javier Ramírez