Tinedo Guía, presidente del Colegio Nacional de Periodistas, alertó ayer sobre una escalada de la censura oficial mediante el reciente cierre de varias emisoras de radio del país. “El gobierno utiliza a la Comisión Nacional de Telecomunicaciones, Conatel, para cerrar las radios, con el subterfugio de que son clandestinas”, expresó.
Destacó que muchas emisoras están en la condición de vencimiento del permiso de dos años para transmitir. “El gobierno se vale de esta situación para castigar a los medios que transmitan noticias y opiniones que muestren la verdad de los hechos o cuestionen la gestión gubernamental”, dijo.
Recordó que en las últimas dos semanas fueron cerradas varias emisoras en los estados Falcón, Cojedes, Yaracuy, Lara y Bolívar, con el agravante de que la medida de Conatel incluyó la confiscación de los equipos.
Citó el caso de la emisora del dirigente Américo de Gracia, de la Causa R en Bolívar, quien ha evidenciado violaciones graves de los derechos humanos como los asesinatos de mineros. “Con el cierre se están perdiendo puestos de trabajo, entre ellos de periodistas”, dijo.
Tinedo Guía señaló que las acciones de Conatel son un aviso a las televisoras para que se autocensuren con el silencio informativo, ante el temor de que les suspendan el permiso de transmisión de cinco años en una interpretación arbitraria por las autoridades de la Ley Resorte.
Recordó que la primera oleada de cierre de medios de comunicación ocurrió durante el gobierno de Hugo Chávez con el cierre de Radio Caracas Televisión y 35 emisoras de radio. “Conatel es un organismo con la función técnica de evitar que una emisora del espectro radioeléctrico se solape sobre otra, pero el gobierno lo ha convertido en censor”, afirmó.
Tinedo Guía sostuvo que el CNP se opone enérgicamente a la censura y la autocensura. Agregó que para superar estas prácticas, que atentan contra el derecho de estar informado, se debe “buscar la manera inteligente de decir las cosas para que el público las sepa”.
Rechazó las agresiones por los grupos paramilitares y las fuerzas del orden, contra 57 profesionales de la comunicación social durante las manifestaciones de la oposición de las últimas 2 semanas.
Violencia reiterada
En los últimos tres años el gobierno ha profundizado la censura, mediante las amenazas y medidas coercitivas para silenciar la crítica contenida en las informaciones de las redes sociales y medios de comunicación sobre la verdadera situación del país, alertó Gloria Salazar, coordinadora de Desarrollo Institucional de Espacio Público.
“Se han hecho más frecuentes y violentos los ataques a medios y periodistas cuando cubren manifestaciones, colas y protestas de temas álgidos para el gobierno, como la electricidad y la salud”, expresó la representante de la ONG.
Destacó que también hay un mayor hostigamiento de los entes de seguridad gubernamentales hacia quienes brindan opinión e información, como economistas o ciudadanos de las redes “por evidenciar una situación de interés público que sucede”.
Salazar señaló que el gobierno ha aumentado significativamente las violaciones al derecho humano fundamental de expresión, y de informar y ser informado, con agresiones que “se han incrementado no solo en número sino en gravedad”.
Advirtió que se ha pasado del ataque verbal al físico, el robo y la confiscación de equipos de trabajo por parte de grupos paramilitares, los colectivos, y cuerpos de seguridad para impedir el trabajo periodístico.
A su juicio, esta situación de censura violenta lleva a los periodistas, medios y ciudadanos de la web a aplicar la autocensura de lo que informan, en perjuicio del ciudadano de a pie que deja de conocer lo que realmente está sucediendo.
Recordó que los tuiteros también son detenidos, interrogados e intimidados.
Salazar dijo que el acoso gubernamental contra quienes informen es una práctica dictatorial del gobierno. “En Venezuela la democracia está muy comprometida, porque no hay separación de poderes y se violentan los derechos humanos, como la libertad de expresión, contenidos en la Constitución, y los acuerdos y tratados internacionales suscritos y ratificados por la República”, expresó.
La Cifra
57 periodistas fueron agredidos las últimas 2 semanas por colectivos y fuerzas de seguridad durante las protestas opositoras.
La SIP rechaza la violencia
La Sociedad Interamericana de Prensa expresó su más profunda condena por los recientes actos de violencia contra la prensa en Venezuela, lo cual revalida la reiterada denuncia de la Federación Internacional de Periodistas, en relación con la limitación de las libertades de expresión y de prensa en ese país.
El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la organización, Roberto Rock, alertó sobre “la escalada de violencia a periodistas y medios que han sido atacados, amenazados e intimidados por ejercer su oficio, y que se encuentran en condiciones de indefensión ante un Estado que los señala como fuente de los males del país, y más bien incentiva y justifica esos ataques”.
Fuente: El Nacional
Fecha: 16 de abril de 2017