De acuerdo con los cálculos de técnicos de Consecomercio, para fines de 2019 la economía se contraerá cerca de 40 %.
“La inflación acumulada en el año se ubicó en 4.679 %, un 39,5 % más que la estimada por la Asamblea Nacional. La demanda agregada interna medida por el BCV disminuyó 37,2 % en el primer trimestre de 2019, en comparación con el mismo lapso de 2018”. Esto indica que se redujo notablemente la cantidad de bienes y servicios consumidos por los venezolanos.
El gasto público cayó 23,9 %, en tanto que el gasto del sector privado bajó 34,8 %. “Todo consecuencia de la disminución del consumo”, dijo el informe de la entidad gremial.
Para Consecomercio, cifras sobre la macroeconomía venezolana publicadas por el BCV, confirmaron que “la hiperinflación venezolana está entre las más largas y profundas de la historia” y para remediar la crisis es imperativo “reformular el marco de políticas públicas existentes”.
Por su parte, Ricardo Cusano, presidente de Fedecámaras, informó ante la plenaria de la Asamblea Nacional que “las políticas unilaterales y erradas del Gobierno y su permanente acoso durante estos últimos 20 años al sector empresarial y sindical, la política de expropiación, expoliación e invasión a la propiedad privada y la excesiva injerencia en el funcionamiento del aparato productivo nacional ha propiciado su más absoluta destrucción, devastando la producción y llevando al país por el camino de la pobreza, el hambre y el éxodo de los venezolanos hacia otros países”.
El gremio que representa Cusano también analizó los resultados oficiales de la economía venezolana divulgados por el BCV.
En tal sentido, opinó que “tenemos que recuperar el poder adquisitivo del salario. No podemos dejar que el hambre se utilice como una herramienta política y de control social. Tenemos que diseñar un nuevo andamiaje legislativo y normas específicas que favorezcan el combate de la hiperinflación y preserve el poder adquisitivo del salario promoviendo más empresa, más trabajo, más productividad”.
Añadió que “la fatal situación política, económica y social que vivimos nos ha llevado a padecer la más atroz y catastrófica tragedia humanitaria, razón por la cual la ayuda humanitaria debe salir de inmediato de la conflictividad política y debe atenderse de manera urgente sin sesgos ni cálculos políticos”.
Por otro lado, dijo que en Venezuela no ha habido, en los últimos 20 años, una sola iniciativa exitosa de diálogo desde los Poderes Públicos constituidos. “Como lo establece nuestra Carta Magna en su articulado del título sexto denominado, Del Sistema Socioeconómico, donde claramente están plasmados los fundamentos de la relación público-privada para promover una economía competitiva, sana y sustentable que genere independencia ciudadana, promoviendo libre empresa, libre iniciativa y propiedad privada”.
Los retos, entonces, para Fedecámaras y, en general, para las fuerzas productivas del país son inmensos. “Necesitamos rescatar el valor del trabajo, de la educación y de la inversión competitiva para superar el rentismo del pasado y construir, desde las cenizas, un nuevo y competitivo aparato productivo”.
Con información de El Pitazo