“Un taller mecánico, si hubiese reparado los mismos 100 carros del año 2013 al 2016, los ingresos hubiesen sido realmente compensatorios con la realidad. En momentos como estos, no (…) En 2017 no vemos que vayamos a tener ni siquiera una bonanza, que vayamos a tener unos ingresos suficientes para poder pagar salarios, pagar servicios públicos y además prestar el servicio en la venta de bienes y en la producción de servicios que el venezolano está acostumbrado”, manifestó en una entrevista que concedió a Globovisión.
“Como venezolanos estamos acostumbrados a adquirir nuestros bienes donde estén, a pagarlos dependiendo de nuestro bolsillo, en momentos como este estamos realmente afectados todos, no tenemos ingresos suficientes como para pagar unos precios internacionales de productos que hay en los anaqueles, principalmente en lo que significa el mes de diciembre (…) Diciembre es un mes de productos importados, no por esta época, es un mes de aceitunas, es un mes de nueces, un mes de alcaparras, lo que es la hallaca”, expresó Ramos.
«El sector comercio es una vitrina, nosotros dependemos de un sector primario que fue golpeado con las expropiaciones y golpeado con los controles; de un sector secundario, igualmente golpeado con las expropiaciones, un control de cambio, un control de precio, control laboral, político, social (…) Si continuamos en esto, vamos a continuar afectados, porque cuando el sector primario produce, el comercio tiene qué vender. Venimos de un viaje al Táchira donde cien mil agricultores nos decían, no tenemos materia prima. No tenemos semillas para sembrar»
Reiteró la necesidad de divisas para el sector comercio para importar productos, «necesitamos un Banco Central de Venezuela que se organice (…) No podemos continuar con un dólar a 10 bolívares, ¿a quién le están vendiendo el dólar a 10 bolívares? Cuando nosotros estamos pagando un kilo de arroz a 3 mil bolívares que significan qué, ¿300 dólares?».
FUENTE: INFORME 21
FECHA: 28 DE DICIEMBRE DE 2016