La estatal tiene que operar por vía manual 29 de las 41 instalaciones que maneja la distribución de energía en la capital zuliana. Ante la falta de mantenimiento, de generación y por la sobrecarga se está “destrozando” la red de distribución eléctrica. La sobrecarga en las subestaciones de transmisión y distribución en Maracaibo hace estragos en las instalaciones eléctricas mientras Corpoelec pierde la capacidad de la operación remota de las mismas por la falta de mantenimiento.
Al menos 63 por ciento de las 41 subestaciones de distribución instaladas en la capital zuliana no puede ser manejada por vía remota por la Corporación Eléctrica Nacional desde el centro de despacho en Caujarito, según reporte de la estatal.
“La incapacidad de operar de manera remota las subestaciones, combinado con la falta de megavatios y la sobrecarga, está destrozando las subestaciones”, alertó el ingeniero José Aguilar, consultor internacional en análisis de riesgos eléctricos.
Advirtió que una de las consecuencias de la pérdida de la capacidad de operación remota es que no hay forma de contener una sobrecarga.
“El sistema de distribución de energía de Maracaibo fue diseñado para ser operado por una operación remota, pero esa capacidad está perdida en 63 por ciento, lo cual obliga a operar las subestaciones manualmente. Este escenario hace muy difícil que se pueda mantener la continuidad del servicio eléctrico sobre todo en horas de la noche por la inseguridad, la falta de personal y de transporte”.
Los sectores más afectados son los de la zona norte y suroeste de Maracaibo, que dependen de las subestaciones de transmisión Rincón, La Arreaga, Urdaneta y Trinidad.
Una de las consecuencias de la sobrecarga y la ausencia de capacidad remota, es tangible con la Subestación Rincón –dijo Aguilar- que perdió un autotransformador en una fecha no precisada por las autoridades de Corpoelec, pero que fue restituido el domingo pasado según informó esta semana Carlos Borges, viceministro de Energía Eléctrica.
De la subestación Rincón, una de las seis subestaciones de transmisión en la capital zuliana, dependen ocho subestaciones de distribución, de las cuales tres explotaron y se incendiaron: Gallo Verde (hoy inoperativa), Zona Industrial y Caujarito.
“El Gobierno habla de sabotaje, pero no es así. Explotan por la sobrecarga a la que son sometidas ante la falta de megavatios”, afirmó Aguilar.
Con información de Diario La Verdad