El año escolar 2016-2017 arrancó con mal pie. Ante esto, los docentes de Sucre realizaron un volanteo como medida de protesta en los semáforos del municipio pues se les adeuda más de 160% de aumentos salariales. Solo en esta jurisdicción son 1.450 docentes municipales que, si bien no han suspendido las clases, las han interrumpido para llevar adelante acciones que han afectado la dinámica escolar de 14 mil estudiantes.

Las dificultades para activar el sistema escolar también se han sentido en Chacao, donde los maestros suman más de 15 días en conflicto exigiendo a las autoridades municipales que se  les reconozca hasta 129% de la deuda. 1.800 alumnos de los tres colegios de la jurisdicción no han podido arrancar el año escolar.

«Para un maestro que devenga menos de Bs 400 diario, con un ticket de alimentación de 30 mil Bs, que no puede cubrir su alimentación y su transporte ni satisfacer las necesidades de sus hijos es muy difícil pararse frente a unos alumnos y asumir su responsabilidad», dijo Antonio Flores, quien es maestro en una escuela rural  de El Hatillo y  pertenece al Sindicato Venezolano de Maestros (Sinvema). En este municipio se les  adeuda 132% de los aumentos.

Manuel Madriz (Sutdcem), docente de Sucre, explicó que los municipios no han recibido los recursos del Ejecutivo Nacional para honrar los aumentos y que la alcaldía de Sucre no puede asumir el pago porque no ha tenido recaudación por encima del presupuesto.

Juan Maragall, Secretario de Educación de Miranda, coincide con los docentes en que este año se avizora muy accidentado. En las 700 escuelas de Miranda (donde estudian 150 mil  alumnos y hay 12 mil docentes)  en la primera semana de clases asistieron 20% de los alumnos, 55% en la segunda y en la tercera 70%. «Nos preocupa que todavía no tengamos 100% de asistencia de alumnos».

A juicio de Maragall, las razones son variadas y van desde el alto costo de las tarifas de transporte, la inseguridad y las colas para comprar alimentos.

«50% de las escuelas de Miranda se ubican en zonas rurales y el acceso necesariamente tiene que ser a través del transporte público. Pensamos que por el alza de tarifas los padres no llevan a los niños», dijo y agregó que en el caso de los planteles de Miranda los maestros no han recibido el pago de los aumentos decretados en marzo y septiembre pues la gobernación no ha recibido los aportes del Ejecutivo Nacional.

FUENTE: EL UNIVERSAL

18 DE OCTUBRE DE 2016

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