El paro nacional de enfermeras agudizó la crisis por la falta de este personal que enfrentan los hospitales en el estado Falcón, que ya registran 3.000 cargos vacantes debido a renuncias y abandono de los puestos de trabajo; profesionales a quienes el salario no les alcanza para mantenerse ellos ni a sus familias.
Han preservado la asistencia de los profesionales en las áreas de emergencia, cuidados neonatales, quirófano y sala de partos durante la jornada de paro convocada por la Federación Nacional de Enfermeras de Venezuela.
La presidenta del gremio que las agrupa en Falcón, Heisa Arévalo, afirmó que continúan sus exigencias de salarios acordes a la tasa inflacionaria del país.
«No podemos aceptar sueldos menores a 400 dólares, porque sencillamente con el actual aumento salarial no se cubren las necesidades de las familias de las enfermeras jubiladas e incapacitadas. Con 150.000 bolívares no compran ni uno de los medicamentos que requieren para tratar sus enfermedades crónicas, la mayoría de ellas adquiridas durante sus años de labores», dijo.
El déficit de profesionales de este ramo se incrementó a 3.000 en todo el estado. En Coro, el Hospital General Dr. Alfredo Van Grieken, el más importante de la región, cuenta con solo 200 de las más de 600 que requieren, debido a que por cada guardia se necesitan entre cinco y seis enfermeras (os) y en la actualidad solo se cuenta con una para atender a una población de más de 40 pacientes por turno.
Arévalo consideró que los esfuerzos que han venido realizando a través del Ministerio de Salud para protocolizar los concursos de cargos vacantes no han dado los resultados esperados, por lo que insistirán en las mejoras salariales para que el gremio se sienta dignificado.
Con información de El Pitazo