La familia González tiene una denuncia. Afirma que en el Hospital Doña Felicia Cabello de Rondón, en El Furrial, al oeste de Maturín; le están negando el tratamiento que requiere su integrante más pequeña, que hoy está recluida en condición crítica en el Hospital Manuel Núñez Tovar.
La niña tiene síndrome nefrótico. Hace ocho días ingresó al hospital necesitando albumina humana y como en el Núñez Tovar no la hay, los médicos le dijeron a la madre que lo solicitara en el hospital de El Furrial, donde sí la hay. Eso hizo la mamá, el lunes 17 de diciembre acudió al centro de salud y tras cumplir algunos requisitos logró que al día siguiente le entregaran una de las 10 dosis que necesita la paciente.
Eso ocurrió cuatro días después del ingreso de la niña al Núñez Tovar. Ese día pidió que le dieran todo el tratamiento, pero le respondieron que no era posible, porque el que había era para atender a los pacientes que están allí recluidos. Lo que hicieron los especialistas del hospital de Maturín fue remitirla hasta el de El Furrial.
La familia asegura que en El Furrial no quisieron aceptarla por falta de médicos. En estos ocho días, los González han visto cómo desmejora la salud de la niña. Los médicos aseguran que ya está a punto de caer en diálisis porque está reteniendo mucho líquido, de hecho su madre explica que no está orinando.
Además de la albumina humana al 20 %, la paciente necesita prednisona y un antibiótico, que han sido comprados por sus padres porque en el hospital Núñez Tovar tampoco hay. Cada antibiótico lo han comprado en 900 bolívares soberanos. La prednisona no se consigue en las farmacias.
Pero no solo por esto han tenido que pagar. En el Hospital Manuel Núñez Tovar no funcionan los laboratorios así que los exámenes sanguíneos que le solicitaron recientemente también tuvieron que pagarlos.
La niña se mantiene con un tratamiento alternativo, pero no es suficiente, afirma su mamá. Además de esperar que en el hospital de El Furrial acepten darles el resto de las dosis, la familia aguarda por cualquier donación. La paciente está recluida en un cuarto aislado en el servicio de pediatría.
Con información de El Pitazo.