Los concesionarios de las estaciones de servicio observan desde hace varios meses que la gasolina despachada en las gandolas de Petróleos de Venezuela contiene mucha agua e impurezas. “Cuando el combustible se decanta queda un residuo similar al pantano”, señaló el dueño de un expendio que solicitó guardar su nombre en reserva.

Ángelo Rosati, mecánico de un taller en el este de Caracas, contó que en los últimos dos meses se han incrementado las reparaciones relacionadas con el sistema del combustible de los vehículos. “Cuando sacas los filtros y las bombas ves que están taponados con una gasolina muy turbia que parece lodo”.

Debido a la mala calidad de la gasolina, tanto de 95 como de 91 octanos, los carros suelen presentar problemas de pistoneo, lentitud en el arranque, aceleración en el trayecto hasta que se apagan, agregó.

“El carro me dejó botada en la autopista el martes en la noche y con esa inseguridad que hay debí buscar una grúa para llevarlo al taller. Me cobran 25.000 bolívares soberanos por arreglarlo, lo que implica descuadrar el presupuesto familiar”, dijo una usuaria.

Un día antes, otro conductor tuvo problemas con su carro y lo llevó al taller del concesionario. “Allí me dijeron que el sistema de la gasolina estaba tapado y debo esperar más de una semana por el arreglo, pues antes del mío hay nueve carros con el mismo desperfecto”, expresó.

La situación llegó a Twitter con mensajes como: “Hoy he pensado en los ineptos con maldad que dieron el visto bueno para distribuir gasolina contaminada en estaciones de servicio. No es un cuento cafetalero que me llegó por mensaje de voz; se dañó mi vehículo”.

Rosati explicó que en situaciones normales el cambio o la limpieza de, por ejemplo, los filtros que están dentro del tanque de combustible se hacen cada 40.000 kilómetros, pero con la gasolina sucia ese mantenimiento se reduce a cada 10.000 kilómetros.

El mecánico resaltó que lo más fuerte para los conductores es el incremento de un día para otro de las reparaciones –hasta ayer estaban entre 10.000 y 25.000 bolívares soberanos, dependiendo del modelo y año del vehículo– porque los proveedores elevan el precio de los repuestos cada 24 o 48 horas.

Los concesionarios sostuvieron que la gasolina llega sucia a los expendios porque Pdvsa no efectúa las pruebas y los controles de calidad con filtrados y limpieza en toda la cadena de distribución del producto, que incluye la refinería, el buque, cuando el combustible es importado, las plantas de llenado y las gandolas.

“Cada vez y con más frecuencia, el combustible turbio impide su paso por los surtidores, lo que amerita lavar los filtros o cambiarlos y pagar el aumento en los costos de mantenimiento en las estaciones de servicio”, destacó el encargado de un establecimiento.

Los expendedores aseguraron que con la situación del carburante sucio se incrementaron las ventas de repuestos del sistema de la gasolina en las tiendas de autoperiquitos y repuestos ubicadas en las estaciones. Hasta el jueves, el precio al público de un filtro era de 500 y 600 bolívares soberanos. Una bomba puede costar entre 4.000 y más de 20.000 bolívares, según el vehículo.

La Cifra

4.000 y más de 20.000 bolívares soberanos cuesta una bomba del sistema de la gasolina de un carro. Un filtro está entre 500 y 600  bolívares.

Con información de El Nacional

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