En el Hospital Central de Maturín la cifra de casos por malnutrición es alarmante. Solamente la semana pasada ingresaron cuatro bebes waraos(todos menores de un año de edad) presentaban un cuadro de desnutrición severa y su estado de salud era delicado, reveló una fuente interna del centro de salud, que no se identificó por razones de seguridad.
Durante esta semana entre el miércoles 5 de febrero y el viernes 7, se reportaron al menos 13 casos de lactantes,entre 0 y 11 meses de edad, desnutridos provenientes de diferentes zonas de Monagas. Según lo asentado en los cuadernos de control en la emergencia pediátrica, de los 13 menores, 5 provienen del municipio Maturín, dos de Punta de Mata, 2 de temblador, 2 de Caripito y 2 del estado Delta Amacuro.
La situación no solo ha alertado a los médicos de guardia, sino que ha generado un colapso dentro de la emergencia infantil. Ante la falta de camas los menores deben compartirla. La fuente informó que hay 2 y hasta 3 niños en la misma cama.
Los pacientes deben compartir las camas, porque son insuficientes. No los hemos remitido a piso porque la situación allá arriba no es diferente. Allá tampoco hay camas desocupadas.” informó la fuente.
En lo que va de 2020 (específicamente en enero) se registraron 8 muertes de infantes por este flagelo. Durante febrero han ingresado al menos 17 bebes con malnutrición. Ningún fallecimiento, pero la preocupación crece por tratarse de menores en etapa de lactancia.
Los síntomas no varían. Deshidratación severa, vómito y diarrea, signos atribuidos a una dieta carente de nutrientes. En la emergencia pediátrica explican que los niños son alimentados con agua de carbohidratos (arroz y pasta),cebada, maicena e incluso leche completa. Los padres de los infantes afirman que son estos los productos que pueden comprar por ser los más económicos. La leche de fórmula es incluso vendida en dólares.
“El hambre nos agarra desprevenidos en Venezuela”
El problema no solo se presenta en la emergencia del HUMNT sino también en los sectores más desposeídos de la capital monaguense. El pediatra y presidente de la Fundación “Por amor a ti” en los barrios la situación con respecto a la desnutrición recrudece.
El pediatra describió que un en un recorrido por 14 comunidades vulnerables en las que fueron atendidos al menos 2100 niños, 840 presentaban impacto en cuanto a su baja talla. Niños que dejaron de crecer de acuerdo con sus medidas y 640 bajos de peso o en riesgo de desnutrición aguda. Los infantes evaluados son de edades comprendidas entre 0 a 10 años de edad.
9 de cada 10 niños en estado de desnutrición que ingresan a la emergencia infantil del Hospital Central Manuel Núñez Tovar, se encuentran en etapa de lactancia. En su mayoría ninguno alcanza un año de edad. Esta situación preocupa a los médicos y es atribuida a la falta de políticas que estimulen en instruyan a las madres sobre una lactancia adecuada.
Otro factor que se suma al proceso de desnutrición es la alimentación de la madre. Según los médicos las madres no se alimentan bien por lo que la producción de leche es escaza, sin embargo aún en estas condiciones igual puede lactar.
2019 cerró con 49 muertes por desnutrición, de los cuales 28 eran oriundos de Maturín. Los decesos mayormente se registraron entre los primeros seis meses del año.
Estadísticas oficiales no se dan a conocer, las autoridades guardan silencio al respecto.
Con información de Crónica Uno.