«El descuido y el abandono asisten a clases y eximen en las aulas» asegura la directiva de la Escuela Nacional Andrés Bello, en Antímano. Esta afirmación no es una simple metáfora, pues consideran a estos elementos   consecuencia de la ausencia de  políticas gubernamentales para las instituciones de educación básica y media en el Área Metropolitana.

Padres y directivos exponen  que las fallas de material de construcción y el déficit presupuestario impiden  ejecutar  reparaciones menores y de mayor envergadura.

En la Escuela Virginia de Ruiz, en La Silsa, la directiva tuvo que restringir el uso de la cancha ubicada en la terraza, pues las paredes perimetrales tiemblan y están agrietadas.

La coordinadora del recinto, Yadira Moya, relató que por temor a un accidente restringieron el espacio. Temen que se repita el incidente que cobró la vida de Lino Daniel Berardi, un estudiante de bachillerato del Instituto Cecilio Acosta, en Propatria, quien murió tras caerle el friso de una pared en la cabeza.

Los defectos de infraestructura no son un hecho aislado, perjudican a 2.044 instituciones de dependencia oficial en Miranda, Caracas y Vargas, según la Federación Venezolana de Maestros. En el Andrés Bello de Antímano las tuberías de los baños colapsaron y los botes de agua comprometen las instalaciones.

María Robalino, subdirectora del colegio, indicó que dos estudios realizados en febrero, por Bomberos y un grupo de ingenieros de la UCAB, coinciden en que la estructura es vulnerable.

La información fue levantada tras un incendio producido por delincuentes que consumió la biblioteca y afectó el techo. La  directora nacional del Programa Escuelas de Fe y Alegría, Noelbis Aguilar, advierte que de 171 instituciones que administran a escala nacional, 39 en Gran Caracas requieren  reparaciones.

«Tenemos problemas de impermeabilización y de manejo de aguas», dijo Aguilar y explicó que han  gestionado arreglos con los representantes, pero no son suficientes. Orlando Alzuru, presidente de la Federación Venezolana de Maestros, estima que entre 60 y 70% de las instituciones tienen problemas de infraestructura. De acuerdo con la Memoria y cuenta 2015 del Ministerio de Educación, en Distrito Capital existen 1.327 planteles, de los cuales 625 son oficiales y 702 de dependencia privada.

Voceros de la Federación de Padres y Representantes indican que la coyuntura se extiende a las 27.626 casas de educación inicial, media y diversificada. «Sabemos de escuelas que no han iniciado clases porque no reúnen las condiciones», declaró Alzuru.

El secretario de Educación de Miranda, Juan Maragall, alerta que la inversión en infraestructura ha estado afectada por la inflación y la caída en las asignaciones. Indicó que para el año escolar 2016-2017, solo 160 instituciones fueron reparadas, de 700 adscritas a la gobernación. «iniciaremos 2017 con un déficit presupuestario de 40%. En 2015 el MinEducación solo reparó 578 colegios, según su balance anual.

FUENTE: EL UNIVERSAL

08 DE NOVIEMBRE DE 2016

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