Las terribles políticas públicas del régimen de Hugo Chávez, continuadas por su hijo adoptivo, Nicolás Maduro han hecho de Venezuela, el país con las mayores reservas petroleras del mundo, la nación de la que sus habitantes huyen como pueden.
Un reflejo de ello es el repunte de las enfermedades que se habían erradicado hace más de 20 años como la difteria y el paludismo. Aunado a ello, los estratosféricos niveles inflacionarios y la escasez de alimentos dejaron las alacenas venezolanas vacías y, tras sí, miles de niños desnutridos y adultos subalimentados, demacrados y enfermos.
En el occidental estado Mérida, el Instituto Nacional de Higiene confirmó 17 casos de difteria, de un total de 37 sospechosos, reseñó El Nacional.
Mientras que en el Hospital Universitario de Los Andes se contabilizan 35 casos y de ellos se han registrado seis muertes, de acuerdo a autoridades sanitarias de la región.
La médico epidemiológico Marlene Salcedo detalló que 7 casos provienen del Zulia, 5 de El Vigía y 5 de la ciudad de Mérida. Todos están siendo atendidos en medio de la desidia en los centros de salud.
Al oriente del país, la situación no es muy distinta ni alentadora. Este jueves falleció una mujer que padecía paludismo, la víctima 31 de la enfermedad. Su hija, Yanitza Sánchez, relató a El Pitazo todo lo que pasó su familia para conseguir el tratamiento.
La semana pasada, su madre presentaba fiebre persistente y malestar general y el viernes comenzaría el tratamiento, pero la realidad fue otra. “Los médicos le hicieron la prueba de la gota gruesa y resultó con paludismo falcíparum. Luego de esto nos indicaron que no tenían tratamiento y la enviaron a la casa”.
La crisis ha provocado la preocupación de organismos internacionales, desde ONG venezolanas hasta la ONU, la Unión Europea y la OEA. Tras realizar un estudio, Cáritas de Venezuela alertó que, de no tomar las medidas correctas para el 2018, la emergencia alimentaria que enfrenta el país podría empeorar.
Yaneth Fernández, directora nacional de Cáritas, alertó que en un año la curva de riesgo de desnutrición aguda en la población infantil entre 0 y 5 años pasó de 8% a 14.5%. “De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) si llegamos a 15% estamos hablando de emergencia alimentaria”.
De acuerdo con el monitoreo actual, la desnutrición ha aumentado porque la dieta es a base de carbohidratos y carece de proteínas, grasas y azúcares naturales. “En la alimentación de los niños actualmente no hay leche, ni huevos, ni carne, ni pescado”.
El monitor del Sistema de alerta, monitoreo y atención en nutrición y salud (Saman) ha arrojado en los últimos meses que la mayoría de la población estudiada come dos veces por día y la deserción escolar ha aumentado.
Publicado por La Patilla
24/11/2017