La población en el país con 18 a 24 años de edad alcanza las 3.136.000 personas, según reveló la Encuesta de Condiciones de Vida. De estos, solo 775.000 asisten a la universidad. Es decir, más de 2,2 millones se han quedado por fuera. En 2014 la atención a estos jóvenes alcanzaba 47 %, cinco años después, se ubica en 25 %.
El retroceso es evidente. En cinco años la cobertura educativa en el sistema universitario ha caído a la mitad. En el grupo de personas en edad escolar (18 a 24 años) el porcentaje de población atendida se redujo significativamente: en 2014 era de 47 %, cinco años después, se ubica en 25 %. Estas cifras de la Encuesta de Condiciones de Vida (Encovi) sugieren que “el esfuerzo de masificación de la cobertura universitaria, en este momento, ha perdido su significado en vista de que no llegan esos beneficios a los sectores más pobres”, dijo Anitza Freitez, coordinadora del estudio que se hace desde 2014.
La población en el país con 18 a 24 años de edad alcanza los 3.136.000 personas. De estos, solo 775.000 asisten a la universidad. Es decir, más de 2,2 millones se han quedado por fuera del sistema universitario. Otras cifras muestran el retroceso: apenas contabilizaron a 155.000 graduados.
El acceso a la educación universitaria está condicionado según el estrato social de la persona. “La probabilidad de estar incorporado en el sistema educativo si se pertenece al quintil más rico es hasta tres veces más alto que cuando se pertenece al quintil más pobre”, explicó Freitez. Del quintil más pobre sólo 16 % asiste a la universidad.
Datos oficiales, dados por Nicolás Maduro, tampoco son favorables para la población en edad de iniciar estudios universitarios. La última vez que se refirió a la matrícula de estudiantes universitarios en Venezuela fue el 8 de octubre de 2019 en un evento por el inicio del año escolar: reportó 2.829.520 estudiantes. Dijo que se trataba de un “récord total”. Sin embargo, esta fue la misma cifra que indicó el 15 de enero de 2017 cuando presentó su Memoria y Cuenta de 2016. La Unesco, en el Impacto de la COVID-19, indicó que en Venezuela hay 2.123.041 de estudiantes universitarios.
La Encovi también indica que cayó la demanda en la educación, pero no hay progreso en la cobertura educativa. La población demandante en edad escolar (3 a 24 años de edad) entre 2014 a 2018 era de 12,7 millones de personas. Para 2019 se estima que hay 1,7 millones de personas menos.
En cuanto a la cobertura educativa entre 3 y 17 años se mantuvo estable con respecto a años anteriores: de 3 a 5 años fue 70 %, de 6 a 11 años; 97 % y de 12 a 17 años; 85 %.
Rezago escolar
Freitez explicó que el rezago escolar alude al «número de años de/sobre edad» que tienen los niños, niñas y adolescentes en el año o grado que están cursando actualmente.
Los resultados de la Encovi indican un repunte importante en el rezago escolar para 2019: en mujeres con edades de 7 a 11 años 25 % tiene un año de rezago escolar. Con dos o más años de rezago, fue 9 %. Para 2018 ambos porcentajes se ubicaron 5 % y 2 %, respectivamente.
En los hombres, la población de 7 a 11 años registró un rezago de un año en 23 % de los casos, mientras que con dos años o más fue 10 %. Para 2018 en el primer grupo apenas fue 8 %; el segundo grupo 2 %.
La situación en la población de 12 a 17 años de edad también es alarmante. 18 % de las mujeres registraron un rezago escolar de un año, en otro 19 % el rezago es de dos años o más. Mientras que los hombres, en 21 % de los casos tiene rezago de un año, esta cifra se duplicó con respecto a 2018. Con respecto a dos años o más, es 19 %. En 2018 fue 9 %.
“Si bien esta población está escolarizada, el hecho de tener uno o más años de rezago escolar los coloca en condiciones de cierta vulnerabilidad que en la medida que no se cuenta con políticas que ayuden a mejorar sus condiciones de vida y su desempeño dentro del sistema educativo están a las puertas de quedar excluidos del sistema”, advirtió Freitez.
Estas brechas, en palabras de Freitez, son más marcadas en los quintiles más pobres. En el quintil más pobre de la población de 12 a 17 años casi la mitad tiene algún grado de rezago escolar.
De igual manera, más de la mitad de la población más pobre no consigue completar los 12 años de escolaridad que van hasta la educación secundaria. En el quintil más pobre, sólo 46 % (de la población de 25 a 34 años) ha completado al menos la educación secundaria. En el caso del quintil más rico fue 98 %.
Asistencia escolar y servicios
La asistencia escolar está condicionada por la cotidianidad del país. De los 7,8 millones de personas en edades de 3 a 17 años, 87 % asiste a la escuela. El otro 13 % no lo hace.
Pero no todos los inscritos en el sistema educativo acuden con regularidad a clases: 40 % falta algunas veces por fallas en el servicio de agua (23 %), faltan docentes (18 %), apagones (17 %), falta comida en el hogar (16 %), falta de transporte (7 %).
De manera que si consideramos esta población que asiste en forma irregular y la población que no asiste, estamos hablando de casi cuatro millones de niños en situación de vulnerabilidad y que tienen limitadas las garantías en el ejercicio de la educación”, enfatizó Freitez.
Sobre el Programa de Alimentación Escolar dos de cada tres de los escolarizados se benefician. Pero sólo 28 % recibe el beneficio, 65 % algunos días y 7 % casi nunca. ¿Cuántas comidas se hacen? 74 % dijo recibir solo el almuerzo, 12 % desayuno y merienda y 10 % solo desayuno. En la encuesta no se indagó sobre la composición de la comida.
La participación de la educación privada también ha caído considerablemente debido a la pérdida de poder adquisitivo en los hogares. Solo 15 % de la población escolarizada de 3 a 24 años acude a un plantel privado. El descenso sugiere nueve puntos con respecto a 2018. Pero hace cinco años 34 % de los estudiantes estaban inscritos en colegios privados.
Con información de Crónica Uno