Durante el año 2018 se ha hecho más frecuente la contratación de seguros de salud en moneda extranjera en Venezuela.
El incremento exponencial de los costos de clínicas privadas, de medicamentos e insumos médicos son los elementos principales que han motivado a los ciudadanos a buscar coberturas internacionales para poder ser atendidos en los establecimientos médicos locales.
Las pólizas nacionales no son suficientes para atender los presupuestos asistenciales y generalmente solo sirven para lograr el ingreso a un centro de salud en caso de emergencia. Después se abre una fase de negociación entre la institución, el paciente y sus familiares. Cuando no se cuenta con un seguro internacional, las personas deben pagar las divisas exigidas por transferencia o en efectivo, esto depende de las preferencias de los doctores y de las clínicas. Generalmente la demanda de pago con dólares en efectivo se impone.
Cada vez es más frecuente que empresas de seguros nacionales emitan pólizas en dólares pero los montos de coberturas son en promedio bajos, sobre los 1000 dólares.
Una torcedura de pie puede costar 350 dólares, una operación básica ginecológica por encima de los 500 dólares, un arreglo dental 60 dólares mínimo y así sucesivamente podemos citar montos de facturas cobradas.
La hiperinflación impone sus reglas, es difícil determinar responsabilidades más allá de las propias de un gobierno que no adopta las medidas necesarias para recuperar el equilibrio económico. Cada sector del país busca protegerse y realizar las oberturas necesarias para seguir operando, en el camino son muchos los que se van quedando atrás.
Con información de Descifrado