La creación de condiciones que aseguren a todos la asistencia y los servicios médicos en caso de enfermedad, así como el mejoramiento de la higiene del trabajo y del medio ambiente en todos sus aspectos, son dos de los preceptos que el Estado venezolano está obligado a cumplir, de acuerdo con el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales suscrito por la nación, razón por la cual las demandas del personal de enfermería deben ser atendidas.
En un comunicado difundido ayer, la asociación de médicos, dedicada a la promoción y defensa de los derechos humanos en la atención hospitalaria, se solidarizó con la protesta iniciada por el gremio de enfermería el lunes 25 de junio, a través de la cual se ha expresado preocupación por las condiciones de salubridad y el deterioro en el sistema sanitario en forma nunca vista.
Aseguraron que al no atender las demandas de las enfermeras el Ministerio de Salud viola al menos cinco artículos de la Constitución en los cuales se consagra la salud como derecho social fundamental y como parte del derecho a la vida; el derecho al trabajo, a la seguridad social y a un nivel de vida adecuado.
También menciona el contenido del Pacto Internacional, que establece que entre las medidas que deberán adoptar los Estados partes están las necesarias para garantizar “la reducción de la mortinatalidad y de la mortalidad infantil, y el sano desarrollo delos niños; el mejoramiento en todos sus aspectos de la higiene del trabajo y del medio ambiente; la prevención y el tratamiento de las enfermedades epidémicas, endémicas, profesionales y de otra índole, y la lucha contra ellas; y la creación de condiciones que aseguren a todos asistencia y servicios médicos en caso de enfermedad.
Tras tres días de protestas enfermeras del Hospital General José Ignacio Baldó, conocido como el Algodonal, salieron a las calles nuevamente para exigir mejores condiciones laborales y aumento salarial. Al paro nacional indefinido se unieron los trabajadores de los hospitales Universitario de Caracas, Jesús Yerena de Lídice, el Oncológico Luis Razetti, Los Magallanes de Catia, Hospital Vargas y la Maternidad Santa Ana. Hicieron énfasis en la exigencia salarial debido a que un profesional devenga entre 600.000 y 800.000 bolívares quincenales, mientras que la canasta alimentaria está ahora por encima de los 200 millones de bolívares.
También en hospitales de Anzoátegui, el personal de enfermería se paralizó. Zuleida Cuiba, vocera del gremio de la entidad, señaló que la protesta continuará hasta que se reciba una solución en cuanto a los salarios, dotación de equipos, insumos y medicinas. “Creemos que el gobierno tiene la capacidad para atender nuestras solicitudes y si no la tiene, que se vaya. Ellos manifiestan que con nuestra acción estamos negando el derecho a la asistencia médica.
Con información de La Patilla