Esperar una semana o más para ser operado de urgencia es parte del drama que viven los pacientes que abarrotan los pasillos de la emergencia de adultos en el Hospital Universitario Antonio Patricio de Alcalá (Huapa) de Cumaná. El centro asistencial no cuenta ni siquiera con un tensiómetro para atención básica.
En un recorrido de Crónica.Uno por este centro de salud, se pudo constatar el deterioro de las instalaciones, la falta de personal médico y de enfermería, así como la carencia de insumos para atender a los pacientes que acuden en busca de algún tratamiento. Asimismo, trabajadores denunciaron de forma anónima que son víctimas de intimidación por parte de la directiva del hospital afecta al chavismo.
En el pasillo que antecede al área de Emergencia hay una mujer. Tiene 98 años y reside en la calle principal del barrio La Trinidad, en la parroquia Ayacucho del municipio Sucre. Una vecina que la acompaña cuenta que la señora «prácticamente vive sola. Tiene dos hijos con discapacidad y la atendemos entre los vecinos. Aquí la estamos acompañando amigos de la comunidad y esperando desde hace más de tres días para que le amputen la pierna que se le ‘gangrenó’ por una herida”.
La mayoría de las personas en el área espera por una de las 40 camas de la sala de hospitalización, casi todos los pacientes presentan patologías por trauma. Entre ellos se encuentra José Luis Ramírez, de 82 años, quien viajó con su hijo desde Santa María de Cariaco hasta el Huapa para operarse debido a una infección. Su hermana, que relevó al hijo en el papel de acompañante, comentó angustiada que tienen más de seis días en el centro asistencial y siguen sin saber la fecha de la intervención, le preocupa que la condición de José Luis empeore y la infección «le suba a la pierna».
El deterioro es evidente
Personal de enfermería que labora en el área de emergencia de adultos sostuvo que «aun cuando en los últimos días han dotado de algunos medicamentos, no son suficientes para cubrir los tratamientos recetados por el personal médico y eso dificulta la atención de los pacientes”.
A su vez, denunciaron otras deficiencias en el centro de salud como el deterioro de todos los equipos de electromedicina, las condiciones de insalubridad de los baños y las áreas de aseo quirúrgico, así como el precario estado del cuarto de descanso de las enfermeras.
La sala de emergencia de adultos cuenta con 40 camas, cuatro adicionales en el área de Trauma Shock de pacientes coronarios y una para emergencia. En el servicio están asignados solo cuatro profesionales de enfermería que no se dan abasto para cumplir con los tratamientos indicados para cada paciente.
Pedro Carvajal, presidente del Colegio de Bioanalistas de Cumaná, afirmó: “Se están muriendo los niños y las mujeres que vienen a parir de manera natural, pero los familiares tienen miedo de denunciar. Y solo la denuncia nos ayudará a visibilizar esta crisis y presionar para que las autoridades se aboquen a atender las demandas del hospital”. Aseguró que en el Huapa reina la desidia de un gobierno al que no le importa nada, ni nadie.
Laboratorios sin reactivos
La situación de los laboratorios del hospital de Cumaná es grave. Están prácticamente en un cierre técnico. No hay reactivos para diagnosticar ni hacer una prueba de VIH; tampoco disponen de material para exámenes básicos como una hematología completa, advirtió Carvajal.
En ese sentido, alertó que el principal centro de salud del estado está utilizando agua residual de los tanques de almacenamiento porque no entra agua de la calle.
Denunció igualmente que los precarios servicios hospitalarios que se prestan en este centro son debido a la escasez de insumos médicos, sumado a la disminución del personal.
Con información de Crónica Uno