Sin medicamentos e insumos, ausencia de camas, falta de equipos médicos, falta de personal capacitado y de mantenimiento; quirófanos sin funcionar, infraestructuras en precarias condiciones.

Para nadie es un secreto que en la emergencia de los hospitales existe una situación compleja, no sólo por ser un centro público y por la falta de medicamentos e insumos como se da a conocer, sino también por la falta de atención y la falta de valor humano, así lo describen las personas que día a día acuden a estos centros hospitalarios.

Tal fue el caso de Angélica Mora que estaba a las afueras de la emergencia del Hospital Universitario de Caracas mientras su hermana espera dar a luz dijo estar “con Dios y La Virgen”. La joven lleva dos noches esperando “porque es una cesárea y hasta que no esté a punto no la meten a quirófano porque hay pocos funcionando. No niego que tengo miedo, pero no tengo de otra”, comentó.

De acuerdo a un trabajo realizado por la periodista Daisy Galaviz, para el diario 2001, indicó que los partos son las emergencias más atendida en los hospitales, sin embargo, en los hospitales de Caracas la realidad es otra. Los heridos por arma de fuego son los primeros en atender.

En el hospital José María Vargas, ubicado en el centro de Caracas, llegó un hombre de aproximadamente 30 años de edad, rodeado de amigos que cargaban su camilla desde el carro que lo trajo hasta la puerta de la emergencia. El hombre ingresó con una herida en el pecho y fue atendido de inmediato.

Jesús Peña, quien vende café y cigarros todas las noches en este centro de salud, comenta que a “los tiroteados los ingresan de una. Los milicianos no se ponen cómicos porque ellos saben”.

Fuente: Sumarium

Fecha: 14 de marzo de 2017

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