La consulta constitucional, democrática y soberana para que los venezolanos expresen, este mismo año, su deseo de que concluya el mandato presidencial de Nicolás Maduro, se ha consolidado como un clamor nacional: así lo corroboraron, este sábado, miles de ciudadanos, junto con la dirigencia política opositora, con motivo de la “Gran Concentración de la Unidad Democrática por el Referendo Revocatorio”.
Bajo la consigna de “Solo un Pueblo Unido Vence al CNE y sus Obstáculos”, el evento realizado en Caracas, tal como estaba previsto, al final de la avenida Casanova, en jurisdicción del municipio Libertador, exhibió una nueva y contundente prueba de la movilización cívica de las mayorías, para exigir, de manera firme y pacífica, que se concrete tan legítima aspiración contemplada en la Carta Magna. En el devenir de la jornada se anunció, igualmente, que el próximo miércoles habrá una marcha hacia la sede principal del CNE, en el centro capitalino.
“Estamos defendiendo la voluntad de un millón 850 mil personas que dijeron queremos revocatorio, queremos solución pacífica; el pueblo salió a la calle y no regresará hasta tener referendo revocatorio”, manifestó Jesús Chuo Torrealba, secretario ejecutivo de la Unidad Democrática.
El máximo vocero de la plataforma partidista fue enfático al señalar que los plazos para el mecanismo continúan estando vigentes, planteados para poder realizarlo antes de que finalice el 2016. “Esto sigue estando dentro de lo posible: la única manera de garantizar eso es que los órganos del sufragio cumplan con su deber, de acuerdo con su propia normativa, si el Consejo Nacional Electoral observa el reglamento comicial y la ley respectiva, acatando el principio de celeridad, para que, tengamos referendo revocatorio este año”, indicando que en el presente momento del país se registraba “una huida hacia delante de un sector del oficialismo”.
“Ellos van tratar como sea, ¡como sea!, de que cualquier proceso electoral, cualquier hecho que solicite una manifestación de voluntad de la gente – que sea para revocar a Maduro, que sea para escoger a nuestros gobernadores, por cierto, lo cual también debe ser este mismo año -, ellos van a intentar eludirlo, porque en cualquier sitio y en cualquier evento se van a llevar una derrota abrumadora, más grande que la asestada el pasado 6 de diciembre”, estimó, a su vez, el presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup.
El titular del ente unicameral aprovechó la oportunidad para reiterar que la Asamblea Nacional no acataría decisión alguna que viole la Constitución de la República, y refutó lo que se augura como una inminente sentencia del Tribunal Supremo de Justicia en contra de la directiva parlamentaria.
“A nosotros nos eligió el pueblo y solo el pueblo nos puede revocar”, enfatizó, pidiendo a los venezolanos que defiendan el “único poder autónomo que resta”.
Mientras, el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski, afirmó que lo único que se pide en esta fase del proceso es que se permita validar las huellas. “¿Por qué le tienen tanto temor a que la gente vaya y coloque su huella, a que se respete el reglamento. Ahora, todas las actividades que desarrollemos deben llevarse a cabo en Venezuela entera, hasta en el último rincón”, destacó, al solicitar que la protesta no se “caraqueñice”.
“Ustedes saben que cuando murió e presidente Chávez en 30 días tuvimos elecciones, porque querían aprovechar el momento de dolor de mucha gente. Se lo decimos a la comunidad internacional: aquí no hay ninguna razón para que este año no haya revocatorio. Salvo que ellos quieran trancar la vía democrática. Si ustedes trancan la vía democrática (dirigiéndose a las autoridades nacionales), nosotros no sabemos lo que pueda pasar en este país, donde en cualquier momento la bomba puede estallar”, advirtió.
El diputado de la Asamblea Nacional, Tomás Guanipa, coincidió con Capriles Radonski, en que da tiempo para efectuar la consulta en este 2016. “El año pasado hicieron una elección a la Asamblea Nacional en cinco meses; esta se puede hacer perfectamente en poco tiempo. Y para ello seguiremos en la calle”, acotó.
Juan Requesens, también miembro de la bancada del cambio en la instancia legislativa, garantizó que el pueblo se mantendrá en la vía pública para demandar que se lleve a cabo el referendo.
“Hemos puesto en marcha una política constitucional que es el revocatorio. Todos los movimientos sociales estamos abocados a la salida de Nicolás Maduro. Llámenlo como quieran – estado de excepción, estado de represión -: el único estado que hay en el país es el de la crisis, el del desabastecimiento, el de la inseguridad”, reclamó.
RR alimenta la esperanza del pueblo
“El revocatorio es la salida democrática a la crisis”.
La sencilla frase, que encarna, al mismo tiempo, un profundo sentimiento, fue la más común empleada por quienes acudieron, masivamente, a la “Gran Concentración de la Unidad Democrática por el Referendo Revocatorio”.
“Aquí estamos, enseñándole a las familias venezolanas, cómo debe exigirse el derecho al referendo, contra un presidente que nos está matando de hambre. No es cuestión de decretos inoperantes: el que no funciona es el gobierno”, estimó la señora Aminta Blanco, mientras caceroleaba con una gran olla.
Para Belkis Palacios, “no se justifica que ahoga vengan a ignorar la voluntad popular. Nosotros firmamos y firmaremos cuantas veces sea necesario. Venezuela no puede seguir sin comida, sin medicinas, sin futuro para los niños”.
“Con el revocatorio luchamos por un Ejecutivo que dialogue, que respete la opinión de todos, que sepa gobernar y que le busque remedio a los problemas; y no un régimen terco que aplica políticas que conducen a la miseria. Este gobierno, conformado por fanáticos, nos mantiene en un estado primitivo”, fue la consideración de Janeth Sayago.
“Con el revocatorio estamos defendiendo nuestro derecho a los alimentos, a los fármacos, a que el país supere el caos”, argumentó el joven Irwin Moreno.
En tanto que Siria García Bello, una representante de la tercera edad, exigió una nación próspera. “No podemos seguir comiendo una sola vez al día, pues hoy tan solo alcanza para el almuerzo. Queremos el referendo revocatorio para que el país arranque, para que se acabe el vandalismo, la crisis económica, el robo, el bachaqueo, y que dejen de ‘pisarnos’ como pueblo”, espetó, enumerando algunos de los muchos padecimientos que afligen a Venezuela.