En octubre hubo 289 fallas eléctricas en Distrito Capital y 1092 en Miranda, según registros del Comité de Afectados por los Apagones. Las parroquias de Libertador no escapan de la realidad del sistema eléctrico y en la región mirandina cada apagón paraliza a sus poblados.
Pasar largas horas sin electricidad ya se volvió el pan de cada día en varias comunidades caraqueñas y mirandinas. En tres meses las fallas eléctricas se duplicaron en ambas regiones y zonas como El Paraíso, Parque Caiza y los Altos Mirandinos lidian diariamente con el mal servicio.
Desde el año pasado, comer en casa de Dinora Torrealba se volvió toda una odisea, más allá de los precios que diluyen su salario. A falta de gas doméstico para cocinar, entre los integrantes de la familia compraron una cocina eléctrica que les resolvió, al menos, hasta junio.
Ahora tratan de cocinar solo lo necesario por temor a perder la comida en la nevera por falta de electricidad o porque –afirma– les ha pasado que duran todo un día sin luz y tienen que comérsela fría.
Lo que hago es que, si queda comida del día anterior, la saco de la nevera apenas me levanto, por si acaso se va la luz justo en el almuerzo, porque pareciera que les gustara racionar justo a esa hora”, exclama Dinora, habitante de Filas de Mariche.
Ahora son más seguidos
En lo que va de año, las fallas eléctricas en la región capital no han hecho sino aumentar. A modo de ejemplo, en Distrito Capital la cantidad de bajones y apagones que hubo entre abril y octubre (1039) superó al total de 2019 (995 al 10 de diciembre), según cifras del Comité de Afectados por los Apagones.
Y la tendencia sigue en aumento. En octubre de este año el Comité contabilizó 289 fallas eléctricas en Caracas (en contraste con las 119 que hubo en julio) y estima que 70 % de ellas fueron bajones de electricidad, que se producen todos los días –casi siempre a la misma hora– y que en ocasiones terminan en apagones durante horas.
Atrás quedaron los tiempos en los que a Caracas, por ser la capital del país, la mantenían completamente iluminada pagando el costo de forzar el ya deteriorado Sistema Eléctrico Nacional (SEN) y ni las comunidades populares se salvan.
La semana pasada, la organización Monitor Ciudad recibió reportes de fallas eléctricas en las parroquias La Vega, 23 de Enero, El Recreo, San Juan y El Paraíso. Esta última ha sido una de las más afectadas, con sectores que estuvieron hasta 24 horas sin servicio y sin justificación alguna por ello.
Lo peor es que no te dicen nada, ni avisan. Era semana (de cuarentena) flexible y perdimos un día completo de trabajo porque no tenía cómo encender las máquinas ni hacer impresiones, nada”, dijo Jesús Marcano, encargado de un cyber en San Martín.
Y mientras en las principales plazas de la ciudad los obreros decoraban y adornaban con luces y guirnaldas navideñas, en la urbanización El Silencio pasaron más de 12 horas a oscuras, algunos sin poder cocinar, entrar a sus clases a distancia o incluso trabajar.
Miranda no se salva
Al menos 4624 fallas eléctricas son las que ha contabilizado el Comité de Afectados por los Apagones entre abril y octubre de este año, la entidad más afectada en la región central por el mal estado del SEN, y solo en el último mes hubo 1092 incidentes, casi el doble que en julio (567).
Los sectores mirandinos quedan aislados por horas. “Aquí se va la luz y es como si el mundo se paralizara, solo se escuchan los pocos carros que tienen gasolina y cuando logras avisar que no hay electricidad, ya han pasado tres o cuatro horas”, señala Kimberly Giménez, habitante de Cúa.
En San Antonio de los Altos y Los Teques ya se volvió costumbre despertar sin el servicio. El concejal del municipio Los Salias, Ángel Román, resaltó que en cuatro semanas de octubre hubo 93 fallas eléctricas en el municipio, según reseña el portal El Tequeño.
Un estudio hecho por el Observatorio Venezolano de los Servicios Públicos (OVSP) y publicado en junio de este año evidenció que 22,9 % de los hogares encuestados sufre de interrupciones eléctricas varias veces al día y 17,4 % todos los días de la semana.
Con información de Crónica Uno