La nueva reconversión monetaria anunciada por el Banco Central de Venezuela (BCV) a partir del 1 de octubre, solo servirá para facilitar las transacciones comerciales diarias, “pero en sí misma no corrige nada” en el contexto de crisis económica que afecta al país desde hace años.

Efecto Cocuyo

La economista Tamara Herrera formula la observación y advierte que de no controlarse la inflación será necesaria una nueva eliminación de ceros a la moneda nacional (serán seis a partir de octubre) en tres o cuatro años o hasta cinco, si el espiral inflacionario es “moderado”.

“La reconversión es una necesidad resultante de la continua inflación que vive el país, pero mientras no se resuelva el problema de base vamos a estar repitiendo esta medida que en sí no corrige nada, lo que hace es aliviar la transaccionalidad porque se usan menos ceros, las facturas salen con un monto apropiado y no serán necesarias varias operaciones, es más práctico”, explica en declaraciones a Efecto Cocuyo.

Ve como algo positivo que a diferencia de la reconversión de 2018, el Ejecutivo no incurrió en una “megadevaluación” del bolívar, acompañada de un ajuste salarial, y que en esta oportunidad solo se buscó facilitar las operaciones comerciales, así como el pago del transporte público a diario.

Medidas dispersas
Venezuela lleva 44 meses en hiperinflación, lo que ha pulverizado el poder adquisitivo de gran parte de la población, por lo que Herrera indica que se trata de un problema integral y no puntual.

Hace énfasis en la necesidad de que el país se enrumbe hacia una verdadera recuperación económica que pasa por acceso a financiamiento internacional, la entrada de inversiones para generar empleos y levantar los destruidos servicios públicos.

“Que vuelva la confianza y los inversionistas entren al país sin temor a ser expropiados, se impulse la producción nacional, que la población recupere su poder adquisitivo. Pero mientras el BCV siga con financiamiento monetario sin respaldo, que genera un empuje reflejado en el precio del dólar, seguiremos en el mismo círculo”, alertó.

En este sentido señala que las medidas dispersas o pequeñas que adopta el Ejecutivo hace que algunos sectores de la economía respondan y otros no, porque no hay demanda de la población y la producción nacional compite en desventaja con las importaciones que no encuentran obstáculos.

“En los países con una economía normal, cuando se crea una moneda es para que dure de 20 a 30 años, nosotros llevamos tres reconversiones en 15 años”, acotó.

Bolívar digital
La economista dijo observar cierta confusión entre la reconversión y la entrada en vigencia del nuevo bolívar digital, contenida también en el comunicado que el BCV divulgó el 5 de agosto. Al respecto recordó que la promesa de ir hacia una economía 100 % digital por parte del Ejecutivo surgió en enero de este año y notó que este jueves se creyó que la reconversión sería digital; es decir, sin emisión de dinero físico.

“Se vieron en la necesidad de emitir nueva moneda y billetes, ni siquiera en los países avanzados no existe moneda 100 % digital, siempre existe la necesidad de dinero físico, más en Venezuela donde el tránsito hacia la modernización, hacia la adecuación tecnológica todavía está lejos por los problemas de las plataformas, la conectividad a Internet y el servicio eléctrico”, sostuvo.

Con la tercera reconversión en el país se informó que a partir del 1 de octubre entrará en vigencia en Venezuela un nuevo cono monetario, con la emisión de los nuevos billetes de Bs 100 (100 millones de bolívares actuales); Bs 50 (50 millones de bolívares hoy); Bs 20 ( 20 millones de bolívares); de Bs 10 (diez millones de bolívares) y Bs 5 (cinco millones de bolívares actuales). Asimismo habrá una moneda de Bs 1 (Un millón de bolívares hoy).

En 2018 se eliminaron cinco ceros al bolívar y se le agregó la palabra soberano, por lo que Bs 100.000 pasaron a ser 1 bolívar soberano. Diez años antes, la primera reconversión ordenó la supresión de tres ceros a la moneda nacional y por ejemplo, un sueldo de Bs 680.540 pasó a denominarse 680,54 bolívares fuertes. En todas las reconversiones ha habido emisión de un nuevo cono monetario (monedas y billetes).

Por lo pronto, destaca Herrera, sí ha habido avances en cuanto a que los pagos en operaciones comerciales puedan hacerse en tiempo real a través de mecanismos como el pago móvil o las transferencias inmediatas entre distintos bancos que ya están empezando a implementarse en entidades como el estatal Banco de Venezuela. Ello, añadió, contribuirá a aumentar la proporción de las transacciones.

Con información de Efecto Cocuyo

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