En 2010 -último año del que se tienen cifras- se registraron 4.601 casos de cáncer de próstata en el país. Es la primera causa de muerte por enfermedad oncólogica en los hombres venezolanos, ocupando, para ese mismo año, el 18,8%.
Esto ha puesto en alerta a los doctores de la Sociedad Venezolana de Urología (SVU), quienes aseguran hacen todo lo posible dentro de la situación país para atender los casos, a pesar de la escasez y los altos costos. El doctor Alberto Páez, presidente de la SVU, explicó que todos los hospitales con un departamento de urología están capacitados para atender a los pacientes y realizar jornadas de pesquisas, pero estas últimas se han vuelto “cuesta arriba”, por lo que intentan hacer despistajes en las consultas regulares.
El secretario de finanzas, Juan Carlos Luigi, trabaja en Carúpano -estado Sucre-, donde antes las jornadas de despistaje se hacían, al menos, dos veces al año. “Ahora es una al año y de broma”, explicó, asegurando que próximamente harían una pagada por empresas privadas.
“Nada más el antígeno prostático específico cuesta Bs. 7.000 por persona”, dijo Luigi. Por cada jornada se atienden, en promedio, 100 pacientes. Esos son Bs. 700.000 por día, sin contar gastos de insumos como jeringa, alcohol y algodón.
Esto sucede en nuestro país durante “Movember” -contracción en inglés de moustache (bigote) y november (noviembre)-, el mes en el que los hombres se dejan crecer el bigote para concienciar sobre temas de salud masculina, como el cáncer de próstata. La enfermedad se origina cuando las células de la próstata comienzan a crecer sin control y, según explicó Luigi, en un principio puede ser asintomática. La única forma de estar seguro de no tener la enfermedad es a través del examen digital rectal.
A medida que se envejece, se hace más posible sufrir de la enfermedad. A partir de los 45 años el examen debería ser obligatorio, tanto si se registran síntomas -malestar durante la micción, micción nocturna frecuente, eyaculación dolorosa y dolores pélvicos crónicos, entre otros-, como si no. “No esperes que tengas síntomas”, dijo Páez.
Cómo se trata en Venezuela
El cáncer de próstata tiene varias etapas de tratamiento. La primera es el tratamiento quirúrgico, que, como hacerse las pruebas, también se ha complicado por la escasez de insumos médicos en el país. Sin embargo, Páez aseguró que consiguen la forma de “resolver” con lo que tienen, así sea usando técnicas anteriores. “Sirven, aunque hayan otras mejores”.
Hacerse una radioterapia también se ha vuelto problématico. Ya para 2013, los cálculos de la Sociedad Venezolana de Radioterapia Oncológica indicaban que entre 10% y 15% de los pacientes mueren a la espera de tratamiento en algunos de los centros de salud del país.
Pero lo más complicado es lo que respecta a la hormonoterapia, el tratamiento principal contra este mal. Los medicamentos usados para este tipo de procedimientos son muy costosos, por lo que solo se puede acceder a ellos a través de las Farmacias de Alto Costo del Instituto Venezolano de Seguros Sociales (Ivss), donde constantemente se denuncian fallas en el suministro de medicinas.
El doctor Julio Romero del Centro Médico Docente La Trinidad explicó que, por lo menos, el Decapeptyl, Lupron y el Zanidip -todas terapias hormonales- desde hace meses llegan de forma irregular al Ivss.
Sin embargo, los doctores coincidieron en algo: no importa las condiciones del país, los hombres deben priorizar y realizar el examen, porque de un diagnóstico temprano depende, en gran medida, la cura.
FUENTE: EFECTO COCUYO
FECHA: 21 DE NOVIEMBRE, 2016