Si la contracción en los niveles de exportación de junio se mantiene por el resto del mes, Venezuela podría promediar su peor promedio de exportaciones petroleras diarias desde la década de 1940, según los datos que maneja el Ministerio de Petróleo.
Propietarios y operadores comerciales de tanqueros empiezan a suspender uno tras otro sus contratos con el gobierno de Venezuela con la finalidad de evitar sufrir las consecuencias de las sanciones dictadas por Washington al gobierno de Nicolás Maduro, por lo que la exportación petrolera venezolana cayó un 28% en lo que va de junio de 2020, y de mantener la tendencia, alcanzaría su peor nivel en casi 70 años.
Documentos y datos vistos por Reuters señalan que diversas operadoras han suspendido sus contratos en los últimos meses, por lo que Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y sus empresas mixtas asociadas solo han exportado siete cargamentos de crudo y combustible en lo que va de junio a clientes primordiales como la italiana Eni, la española Repsol y la estatal cubana Cubametales. Por el contrario, unos cinco cargamentos programados para junio fueron cancelados por Pdvsa y los operadores de buques.
Con estos envíos, Venezuela promediaría un estimado de 325.000 barriles por día (bpd) en lo que va de mes, muy por debajo de los 452.000 bpd registrados en mayo, que representaron un mínimo en los últimos 17 años.
Si la contracción en los niveles de exportación de junio se mantiene por el resto del mes, Venezuela podría promediar su peor promedio de exportaciones petroleras diarias desde la década de 1940, según los datos que maneja el ministerio de Petróleo.
A inicios de 2019, antes de que Estados Unidos aplicase sanciones que restringieran las operaciones de importación y exportación de crudo, Venezuela exportaba aproximadamente 1,4 millones de bpd, según datos de Refinitiv Eikon.
Es decir que en un año y medio, la exportación de crudo de Venezuela se ha contraído al menos en un millón de bpd. Esta caída ha obligado a Pdvsa a reducir su ya mermada producción de crudo, pues el espacio disponible para almacenamiento está colapsado.
Tanto Repsol como Eni, dos de los pocos compradores de crudo venezolano, argumentan que no violan las sanciones y regulaciones impuestas por Estados Unidos, ya que el negocio con Venezuela se hace a modo de pago de dividendos y deudas.
Con informaciòn de Tal Cual