Apenas ocho días después de que comenzara la cuarentena preventiva contra el COVID-19, las fallas de combustibles ya interrumpen las cadenas de suministros de la leche, el queso y la carne. Al punto que los productores nacionales de varios estados piden que Petróleos de Venezuela (Pdvsa) estructure un plan para garantizarles el combustible necesario, para que estos alimentos puedan llegar a los diferentes comercios de toda Venezuela.

“Tuvimos una reunión con el Jefe de la Zodi de Aragua (Zona Operativa de Defensa Integral) y nos trató muy bien, pero él no puede ayudarnos. En Maracay hay solamente dos bombas y esta mañana estaban cerradas. Eso se está repitiendo en varias partes del país” relató Roger Figueroa, presidente de la Cámara Venezolana de la Industria Láctea (Cavilac)

Las fallas con el combustible comprometen primero la distribución de los alimentos terminados, pero también la producción de los mismos. La gasolina y el gasoil, no en vano, están dentro de las prioridades económicas en medio de esta pandemia.

Figueroa detalló que la producción de leche, de quesos y de yogures cayó a la mitad, durante la primera semana de la cuarentena para combatir al nuevo coronavirus. Esta situación es consecuencia de que los productores enfrentan trabas para que les lleguen materias primas como el azúcar, los empaques y los conservantes, eso sin hablar de la poca movilidad que tienen los trabajadores para llegar de sus hogares a las plantas de producción.

“Se nos dijo que solamente con la guía de Sunagro (Superintendencia de Nacional de Gestión Agroalimentaria) y el carnet del trabajador bastaba como un salvoconducto, pero hemos tenido problemas para recibir la materia prima, para devolver los camiones vacíos y los choferes no han podido llegar porque no tienen gasolina ni siquiera para sacar los camiones”, detalló Figueroa.

Cavilac estima que las empresas pasaron a utilizar solo entre 15% y 20% de la capacidad de producción instalada. Esta reducción estuvo impulsada por los problemas para conseguir tanto la gasolina como el gasoil, aunque ya el sector enfrentaba dificultades varias antes de que se confirmaran los primeros pacientes infectados en el país con el nuevo coronavirus.

“Toda la situación del sector lácteo precede a la pandemia y la cuarentena, lo que estamos viendo es un agravamiento sustancial de lo que ya teníamos. Antes de esto estábamos produciendo alrededor de 30% de la capacidad instalada y que se vio reducida aún más durante la semana pasada” explicó Figueroa.

Varios estados afectados

Aragua no es la única entidad que padece las fallas de combustible. Los ganaderos de Barinas, Apure, Táchira y Cojedes, al igual que los agricultores de Mérida, alzaron la voz para llamar a que Pdvsa pueda armar un plan de suministro organizado para todos los productores de alimentos en el país.

“Sin combustible, ¿cómo movilizamos la producción láctea diaria como la leche y el queso desde nuestras unidades de producción? Es momento de establecer estrategias y protocolos que nos permitan promover la alimentación de la población en medio de esta pandemia”, aseguró la Asociación de Productores Rurales del Estado Barinas (Asobarinas), a través de un comunicado público.

El llamado para que Pdvsa estructure un sistema de suministro para los productores de alimentos es generalizado en casi todos los estados del país.

Desde principios de esta semana, los voceros de la Federación Nacional de Ganadores de Venezuela (Fedenaga), la Confederación Nacional de Agricultores y Ganaderos de Venezuela (Confagan), la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios (Fedeagro) y la Federación de Asociación de Cañicultores de Venezuela (Fesoca) insisten en que las fallas de combustible compromete a la producción nacional y que esto puede resultar en que aparezcan los primeros signos de desabastecimiento en algunos puntos del país en medio de la cuarentena preventiva contra el COVID-19.

Con información de Efecto Cocuyo

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