Un centro hospitalario en terapia intensiva. Las fallas de insumos y medicamentos, la interrupción de servicios básicos y la ausencia de reactivos persisten en uno de los hospitales oncológicos más importantes del país, el Dr. Luis Razetti, ubicado en el barrio de Cotiza.
El año 2018 cerró sin operaciones para el centro asistencial que desde al menos 2017 se ha declarado en “paro técnico” por la falta de los insumos más básicos dentro de sus quirófanos. A principios del año pasado, las salas de operaciones estuvieron paralizadas por cuatro meses hasta que, finalmente, reabrieron en el mes de junio.
Sin embargo, las irregulares dotaciones volvieron a paralizar las cirugías en el oncológico. “Se terminó el año pasado sin poder operar. Ahora estamos operando, pero tenemos muy poco material. Hay fallas puntuales, sobre todo en compresas y suturas”, apuntó un médico oncólogo que pidió mantener su nombre bajo reserva.
El doctor detalló que en noviembre del año pasado llegó una dotación de medicamentos antineoplásicos (que impiden el desarrollo y la proliferación de células tumorales) para los 10 tipos de cáncer más frecuentes.
No obstante, advirtió que la existencia de medicamentos está “lejos de satisfacer la demanda de todos los pacientes”.
Desde hace más de un año, el servicio de radioterapia está inoperativo y solo hay una radióloga para atender la alta demanda de los pacientes en los exámenes de ultrasonido.
Ni por ser un hospital el Oncológico Luis Razetti se salva de las constantes interrupciones en el suministro de agua. “Estamos permanentemente sin el servicio. Apenas tenemos agua entre cuatro y seis horas al día”, denunció el médico.
El Razetti de Cotiza no es el único centro de salud azotado por la crisis de servicios. En noviembre del año pasado, la organización Médicos por la Salud condujo una encuesta que reveló las severas fallas de agua que atraviesan los hospitales de todo el país.
En Encuesta Nacional de Hospitales, la organización reveló que de un total de 40 centros públicos monitoreados por personal médico durante una semana, 70% reportó haber presentado interrupciones en el suministro de agua.
La escasez de reactivos también asfixia a los pacientes oncológicos en medio de la crisis de salud y la hiperinflación. El laboratorio del centro asistencial presenta una falla de insumos que oscila entre el 80% y el 90%, por lo que las personas no pueden practicarse el perfil de rutina y el examen preoperatorio antes de someterse a cirugía.
Con información de Efecto Cocuyo