La falta de combustible en las tres estaciones de servicio persiste en la capital del estado Amazonas. Aunque el gobierno regional ha tratado de buscar una solución, la situación empeora cada día, ocasionando constantes protestas de parte de conductores, quienes exigen una pronta resolución.
El viernes 1° de noviembre, más de 200 motorizados bloquearon la entrada a Puerto Ayacucho, como medida de presión ante la falta de respuesta de parte de los encargados de la estación de servicio Cataniapo en la Florida, por la escasez de gasolina.
La protesta duro casi ocho horas, lo que originó un congestionamiento de vehículos en la 9 de Diciembre, cuyos conductores se vieron obligados a cambiar la ruta.
Gregory Contreras, quien se encontraba en la protesta, manifestó que una vez más se sienten burlados por las autoridades de gobierno. Enfatizó que en reuniones pasadas le garantizaron el combustible a los rezagados; sin embargo, ha resultado todo lo contrario. Acotó que en la estación Cataniapo, la gasolina se agota muy rápido y son muchos lo que se quedan en cola y en la larga lista de espera.
Julio César Bautista acotó que decidieron manifestar pacíficamente en la entrada a la ciudad, porque el gremio se sintió burlado, en vista de que llevaban varios días esperando que llegara el combustible y, una vez más, la cantidad que se descargó no alcanzó para las placas que les correspondía surtir. A su juicio, la situación está empeorando y no hay una respuesta clara de parte del gobierno.
Esta manifestación inició a las 7:30 de la mañana, en la avenida Orinoco, donde está ubicada la referida bomba de gasolina, y duró hasta las 3:00pm. Esto se debió a que el gerente informó que no había combustible, lo que desató la ira de los que se encontraban en cola.
Inmediatamente hicieron acto de presencia funcionarios de la Guardia Nacional (GN) y la Policía Nacional Bolivariana (PNB), por lo que decidieron trasladarse a la redoma Autana y cerrar la entrada a la ciudad.
Fuera de control
Puerto Ayacucho sigue viviendo a diario las consecuencias por la escasez de combustible. Largas colas en las dos gasolineras que están en el centro de la ciudad congestionan el tráfico, además de la falta de transporte público, sumando el abuso y especulación en el precio del pasaje de parte de algunos taxistas y transportistas, lo que es catalogado por los usuarios como un “total desgobierno”.
Miguel Bernal Caballero comentó que el problema del combustible en la región está “fuera de control”. Señaló que ni el gobernador, con todos sus contactos, ha podido resolver esta situación, a pesar de la creación de la empresa Combustible Amazonas y la instalación del chip. Considera todos estos intentos como fallidos, porque, según su apreciación, solo le ha traído más problemas a la población.
Municipios a la deriva
Las quejas de los habitantes de los seis municipios restantes también se hacen sentir por esta situación. El caso más resaltante es el de Manapiare, donde los que allí radican piden a gritos a la Zona Operativa de Defensa Integral (Zodi) que les sedan los cupos y la cantidad necesaria de gasolina para poder trasladarse hasta la capital del estado a comprar alimentos y hacer otras diligencias.
Con información de El Pitazo