Nicolás Maduro designó el jueves pasado a Mayerlin Arias como ministra de Agricultura Urbana, que tendrá bajo su responsabilidad “relanzar un plan crucial para la soberanía alimentaria. Sin embargo, productores agrícolas sostienen que insistir en ese ministerio es continuar en el camino equivocado: no se resolverá el desabastecimiento de comida.
El primer vicepresidente de Fedeagro, Celso Fantinel, afirmó que la agricultura urbana no va a recuperar la soberanía alimentaria. El camino correcto es implementar un modelo como el que estaba vigente antes de 2008, cuando los productores contaban a tiempo con los agroinsumos y fertilizantes que requerían para iniciar los ciclos de siembra. “También teníamos algo de repuestos e importación de maquinaria. Eso sí es soberanía alimentaria”. En ese entonces había distribuidoras privadas que traían insumos para el campo, principalmente Agroisleña, expropiada en octubre de 2010.
Productores han insistido en que los programas agrícolas urbanos del gobierno no han funcionado. Fantinel recordó que en 2016 la entonces ministra de Agricultura Urbana, Lorena Freitez, abastecía las ferias solidarias de verduras, que organizaba con las asociaciones productoras privadas. “Las hortalizas venían de los productores de los Andes y no de los edificios, de los apartamentos ni de esa agricultura urbana”, señaló. Cuestionó la propuesta de quien también fue ministro del despacho, Freddy Bernal, de criar chivos en los hogares.
Sergio Bernáez, ingeniero agrónomo y director pecuario de Fedeagro, coincidió que el nombramiento es persistir en el error. “A través del ministerio no se va desarrollar una política agrícola seria que lleve al abastecimiento. Desde un principio se sabe que no está al servicio de la producción, es pura propaganda partidista que no le trae ningún beneficio al país”.
Añadió que el gobierno debe darle la oportunidad a la iniciativa privada para que pueda impulsar el proceso productivo en el campo: “Me preocupa la producción de este año. Los niveles de siembra de maíz son alarmantes”.
Fantinel apuntó que en el ciclo de invierno, que está a un mes de culminar, solo han logrado sembrar 55.000 hectáreasde maíz en Portuguesa, cuando deberían llevar 200.000 hectáreas. “Eso da tristeza”, expresó.
Precisó que hace 10 años en los campos se producían 35% de maíz amarillo y 100% del blanco, 100% de arroz, 75% de caña de azúcar y 100% de hortalizas. Los agricultores han advertido que llevan una década de caída sostenida de la producción debido a la falta de divisas para importar insumos y repuestos para la maquinaria agrícola, y la severa escasez y precios elevadísimos de los suministros. Fedeagro pasó de satisfacer 70% del consumo nacional a 25%.
Con información de El Nacional